Ceuta

Intenta viajar a la península escondido en un furgón de la Guardia Civil

La inmigración clandestina suele dejar historias curiosas, sobre todo en zonas fronterizas como Ceuta y Melilla. Pero que un inmigrante intente llegar a la península escondido en un furgón policial es algo novedoso.

El puerto de Ceuta ha sido el escenario de esta curiosa intervención policial, una más para engrosar las estadísticas de detenciones de inmigrantes irregulares, pero que pasará a formar parte de una lista de casos que se producen por primera vez.

Según ha informado hoy a Efe un portavoz de la Delegación del Gobierno en Ceuta, el suceso se produjo a las 08.15 horas de la mañana del pasado viernes, en el control de embarque del puerto ceutí.

Uno de los muchos inmigrantes argelinos y marroquíes que suelen frecuentar las instalaciones portuarias aprovechó el descuido de un conductor para introducirse en el interior de un microbús, cuya puerta no estaba cerrada con llave.

El inmigrante desconocía que el microbús pertenecía a la Guardia Civil, aunque el anagrama del instituto armado era visible tanto en su exterior como en su interior.

Un perro antinarcóticos destinado en la zona alertó a los agentes de algo irregular en el interior del vehículo, por lo que los funcionarios del instituto armado procedieron a inspeccionar el microbús antes de embarcar en uno de los barcos de pasajeros que enlazan Ceuta con Algeciras (Cádiz).

Escondido entre los asientos del microbús policial fue encontrado el inmigrante, natural de Argelia, que fue detenido y trasladado a las dependencias policiales.

El argelino estaba censado en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) y pretendía llegar como polizón a la península, sin saber que el vehículo donde se acababa de introducir pertenecía a la Guardia Civil.

Fuentes portuarias han explicado a Efe que la zona del puerto y sus aledaños suele ser frecuentada por inmigrantes, principalmente argelinos y marroquíes, que intentan viajar como polizones bien ocultos en vehículos o subiendo por las cuerdas de amarre al interior de los barcos.

En esta ocasión, el inmigrante argelino se topó con un furgón policial, al igual que hace unos años le ocurrió a otro grupo de inmigrantes que se introdujeron dentro de la patrullera "Río Miño"de la Guardia Civil, que estaba atracada en el puerto ceutí.

La inmigración irregular, sin duda, tiene a veces estos "descuidos"curiosos.