Opinión

Órganos impresos, tejidos regenerados y sangre artificial

La medicina regenerativa avanza transformando la lucha contra las enfermedades y el envejecimiento

Inyección de plasma en la rodilla de una mujer
Las terapias regenerativas buscan revertir la edad biológicaDREAMSTIMEDREAMSTIME

Las terapias regenerativas y la formación de órganos en laboratorio están transformando la medicina moderna con avances que hace poco parecían ciencia ficción. La medicina regenerativa busca reparar, reemplazar o regenerar tejidos y órganos dañados mediante el uso de células madre, biomateriales, ingeniería genética y bioimpresión 3D. Su objetivo, entre otros, pasa por restaurar funciones corporales sin depender de los trasplantes tradicionales.

La ingeniería de tejidos combina células, andamios (estructuras de soporte) y moléculas bioactivas para crear tejidos funcionales. Se usa para fabricar piel, cartílago y otros tejidos que ya han sido aprobados para uso clínico limitado. La bioimpresión 3D utiliza células vivas como «tinta» para imprimir estructuras orgánicas capa por capa. Ya se han logrado imprimir piel, cartílago, prototipos de riñones y corazones. Las células madre pluripotentes son capaces de convertirse en cualquier tipo de célula del cuerpo. Se emplean para regenerar órganos como hígado, corazón y páncreas. Con la descelularización y recelularización se elimina el contenido celular de un órgano donado, dejando solo su estructura, y luego se repuebla con células del paciente para reducir el riesgo de rechazo. También se estudia en la formación de órganos bioartificiales que combinan tejidos biológicos con materiales sintéticos para mejorar la compatibilidad con el cuerpo humano.

Actualmente se está realizando en regeneración cardíaca. Se han implantado parches de músculo cardíaco creados con células madre en humanos, sustituyendo el tejido necrosado tras infarto, mejorando la función del corazón. Los cultivos de piel artificial ya se usan en hospitales españoles para tratar grandes quemados. También se están creando organoides, es decir, mini órganos vascularizados creados en laboratorio para estudiar enfermedades y probar fármacos. Los beneficios de estos desarrollos son evidentes en los trasplantes: no es necesario un donante; se reduce o elimina el riesgo de rechazo inmunológico; y, desde luego, va a suponer un gran avance en medicina personalizada y desarrollo de fármacos.

La medicina regenerativa y la formación de órganos en laboratorio están avanzando a pasos agigantados durante este 2025, con investigaciones que cruzan fronteras científicas y tecnológicas. Se están usando células madre pluripotentes inducidas (iPSCs) para crear células específicas del paciente, lo que permite terapias personalizadas sin riesgo de rechazo inmunológico.

Las terapias con células madre ya se aplican en lesiones de médula espinal, enfermedades cardiovasculares, alzhéimer y párkinson. Hay laboratorios españoles que ya están desarrollando sangre artificial para pacientes con grupos sanguíneos raros, y también se están diseñando terapias programables dirigidas a enfermedades específicas gracias a algunos algoritmos que funcionan con inteligencia artificial.

Utilizando células madre, bioimpresión 3D, ingeniería genética y biomateriales inteligentes, la medicina regenerativa está revolucionando el tratamiento de enfermedades crónicas, degenerativas y lesiones graves. En España, esta revolución se materializa en proyectos como el nuevo Centro en Red de Terapias Avanzadas de Castilla y León (CreTACYL), que agrupa a todas las universidades públicas de la comunidad y aspira a duplicar el número de ensayos clínicos en los próximos cinco años.

Las aplicaciones clínicas ya están cambiando vidas. En hospitales españoles se han implantado parches cardíacos creados con células madre. Los organoides –mini órganos cultivados en laboratorio– permiten estudiar enfermedades como el alzhéimer y probar fármacos sin necesidad de ensayos invasivos. En odontología, se desarrollan implantes bioactivos y técnicas de regeneración de tejidos periodontales.

En el
campo de la neurología, se investiga el uso de células madre para tratar lesiones medulares, párkinson y esclerosis múltiple. Incluso en estética, la regeneración capilar con células madre promete grandes soluciones para la calvicie. A diferencia de la edad cronológica, que es el tiempo que has vivido, la edad biológica es un indicador de la salud y el funcionamiento de tus células y órganos. Las terapias regenerativas buscan revertir esta edad biológica, restaurando el funcionamiento del cuerpo a un estado más joven y saludable.

La medicina regenerativa representa un cambio de paradigma en la lucha contra el envejecimiento, pasando de un enfoque centrado en el tratamiento de los síntomas a uno que busca reparar y reemplazar las células y tejidos dañados para restaurar la función a nivel biológico. La medicina regenerativa aborda el envejecimiento en su origen, tratando el deterioro como una enfermedad que se puede prevenir, ralentizar y, en última instancia, revertir.

La medicina regenerativa utiliza terapias para reparar el ADN dañado y restaurar la función de las células que han envejecido. Esto incluye la activación de enzimas como las sirtuinas, que juegan un papel crucial en la reparación celular. A medida que envejecemos, las células madre del cuerpo pierden su capacidad para dividirse y diferenciarse. La medicina regenerativa utiliza terapias con células madre para reemplazar las células viejas y disfuncionales, o para generar tejidos completamente nuevos, devolviendo a los órganos y sistemas una funcionalidad más juvenil.

En definitiva, contribuye, junto con otras nuevas herramientas de la biología molecular y la biomedicina,
a ese objetivo humano de alcanzar la inmortalidad. Mientras tanto, en un laboratorio español, una impresora 3D termina de construir un fragmento de cartílago humano. No es ciencia ficción. Es el futuro, y ya está entre nosotros.