Opinión

Sensaciones únicas

Dibujar palabras es único y debe seguir siéndolo

Educación sexual por Marina CASTAÑO
Marina Castañolarazon

No se trata de hacer la guerra a las máquinas, gracias a las cuales la vida se nos facilita y hasta se nos prolonga cuando la ciencia echa mano de ellas para avanzar en investigaciones que hacen mejorar nuestra salud y la calidad de nuestro paso por este valle de lágrimas. No, me refiero a sensaciones humanas, únicas, insustituibles, que tienen que ver con la piel, con los sentidos en general, con la intensidad de sentirse humano. Coger un lápiz y un papel, instrumentos que están cayendo en desuso, está quizá volviendo a ser valorados precisamente por eso, por la tristeza que supone el hecho de no recibir una carta, una nota que lleva el alma de quien la escribe impresa en cada trazo. Dibujar palabras es único y debe seguir siéndolo, hemos de continuar transmitiendo a los que vienen detrás esa delicadeza, ese arte que nos viene dado por herencia desde que el hombre es hombre, desde cuando ni siquiera había otra forma de hacerlo más que afilando una piedra para grabar en la pared un dibujo, un mensaje, hasta aquellos románticos momentos en que se tallaba en el tronco de un árbol un corazón para que allí permaneciera con el paso del tiempo aun cuando el amor estaba ya muerto. No vale unas palabras escritas en el móvil, es mucho más valioso un trozo de papel con un mensaje que luego se puede guardar en una caja para siempre y así tener conciencia en los últimos años de nuestro paso por la tierra que alguien pensó en nosotros y lo plasmó en la servilleta de un bar pidiéndole un bolígrafo al camarero.

La otra semana cumplió años un querido amigo y la idea de regalarte palabras estampadas en un papel primorosamente encuadernado arrancó con un acróstico que, desgranando las letras iniciales de su nombre, expresaba los sentimientos de tantos años de amistad. No, que no se pierda la sensación humana de escribir a mano y de guardar papeles. Que no se pierda el vibrar de la piel de ese momento en que se leen los sentimientos allí impresos. Por siempre las cartas serán palabras que no se llevará el viento.