Toledo

Volver a la autoescuela veinte años después

Objetivo: reducir las cifras de siniestralidad. La DGT estudia implantar una «reválida teórica» para los conductores con más de 20 años de carné de conducir. Hace unos años la mayor tasa de accidentalidad estaba entre los jóvenes pero ahora se encuentra entre los mayores de 44. Una directiva europe expone que, de forma excepcional a los mayores de 50 se les puede reducucir el período de renovación

Una clase de conducir en una autoescuela de Brooklyn, en 1950
Una clase de conducir en una autoescuela de Brooklyn, en 1950larazon

La siniestralidad registra ahora una de las cotas más bajas que hayamos alcanzado nunca en España ((1.903 muertos en 2012), pero no deja de sorprender el hecho de que asistamos a una inversión de los datos de tal manera que, si bien hace unos años la mayor tasa de accidentalidad la encontrábamos en los jóvenes, ahora es entre los mayores de 44 entre los que se aprecia un mayor aumento de accidentes con víctimas. La DGT es consciente de ello y, ayer, la directora general de Tráfico, María Seguí, confirmó que su departamento estudia la implantación de una prueba teórica para renovar el permiso de conducir, una idea que expuso también este fin de semana durante la Convención Anual de la Confederación Nacional de Autoescuelas, que se celebró en Toledo. Se trataría de una «reválidad teórica». ¿Cuándo? y ¿para quién? aún no está decidido, pero la directiva europea sobre renovación del permiso de conducir en vigor desde enero de este año para los 27 países miembros de la UE prevé la obligación de renovar el carné de conducir cada 10 años hasta los 65 cumplidos, y cada cinco a partir de esa edad. No obstante, la directiva expone que, de forma excepcional, a los mayores de 50 se les puede reducir el periodo de renovación o bien los gobiernos pueden introducir otras medidas específicas, entre las que se incluyen los cursos de reciclaje a esta edad. Porque ahora, en España, un conductor sólo actualiza sus conocimientos por infracciones cometidas. De ahí que, acogiéndose a esta regulación, la DGT pueda introducir los cambios que ahora plantea. «No me apeo de esta idea porque la formación y la actualización de los conocimientos son clave para reducir los accidentes en la carretera», reconoció María Seguí.

Las autoescuelas apuestan por que esa «reválida teórica» se haga cuando un conductor acude a un centro para renovar sus aptitudes psicotécnicas para conducir. «A la par que se constatan sus condiciones físicas para conducir, el automovilista se podría someter a un test on-line que certifique que sus conocimientos están actualizados. En caso contrario, deberían pasar por la autoescuela a recibir un curso de reciclaje de distintos niveles, dependiendo de su grado de desactualización. No se trataría de pasar de nuevo un examen sino de refrescar conocimientos», aclara el presidente de la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE), José Miguel Báez.

«Los conductores que adquirieron su permiso hace veinte años no han adquirido formación que ahora se imparte en las autoescuelas. Ahora se incluye formación sobre los efectos del alcohol, las drogas, la fatiga en la conducción...», explica el presidente de las autoescuelas. Báez considera que es necesario «refrescar» en algún momento los conocimientos. Y más a partir de un estudio reciente que la CNAE encargó a la Universidad de Valencia y que concluía que el 97 por ciento de los conductores con más de veinte años de experiencia habrían suspendido si hoy tuvieran que someterse a un examen de conducir de los que hoy se realizan. Báez incluso asegura que «los conductores que acuden a la autoescuela a realizar los cursos para recuperar puntos, y que lo hacen malhumorados y a disgusto, al final acaban valorando de forma muy positiva lo aprendido y en el 96% de los casos recomendarían pasar a todos los conductores por este tipo de curso».

Ahora bien, ¿debería tener algún coste para el conductor este tipo de formación», Mario Arnaldo, presidente de Automovilistas Europeos Asociados, considera que «deberían ser gratuitos», porque si no, se podría tachar esta medida de recaudatoria ahora que las autoescuelas registran un 30% menos de alumnado. «El problema es que las normas de tráfico están cambiando continuamente. Desde 1990 vamos a razón de una modificación legal cada año y medio».

(Con información de M. Torres, C. Maza, D. Menor y A. del Río)