El desembarco de Xiaomi en el mundo del automóvil está siendo, cuanto menos, ruidoso. Y eso que la compañía todavía no ha dado indicios sobre su desembarco a nivel global.

El pasado 22 de mayo, la compañía desveló su primer SUV eléctrico, el YU7, y aunque su lanzamiento oficial está programado para julio, ya hay un dato que nos deja con la boca abierta: la demanda es tan alta que, sin tener precio ni estar a la venta, las expectativas de espera ya son de un año.

Un precio desconocido y una lista de espera interminable

Lei Jun, fundador, presidente y CEO de Xiaomi, ha confirmado que el precio oficial del YU7 no se cerrará hasta "1-2 días antes de su lanzamiento" en julio. Con esto, desmiente los rumores que apuntaban a que el precio de salida sería solo 20.000 yuanes más alto que el SU7, o que rondaría los 235.900 yuanes (unos 29.000 euros) La incertidumbre sobre el precio no hace sino alimentar la expectación por este modelo, que ya se mostró en Pekín el 29 de mayo y estará disponible en 92 ciudades en las próximas semanas.

Más allá de los precios y las fechas, Xiaomi sigue apostando fuerte por el control total de su tecnología. Lei Jun también ha adelantado que el chip automotriz propio de Xiaomi está actualmente en desarrollo y se espera que sea lanzado "pronto", siguiendo los pasos del XRING O1, su nuevo chip para smartphones. Aunque no se ha especificado si este chip será para la conducción autónoma o para el sistema de infoentretenimiento, este movimiento sitúa a Xiaomi al nivel de otros grandes actores como Nio o Xpeng, que también desarrollan sus propios chips para automoción.

La ambición de Xiaomi en el sector EV es clara. Lei Jun ha expresado su confianza en que el negocio de vehículos eléctricos de la compañía será rentable en la segunda mitad de 2025. Este optimismo, sumado a la abrumadora demanda que ya está generando el YU7 incluso antes de su lanzamiento, demuestra que Xiaomi no ha venido a jugar un papel secundario en la revolución del coche eléctrico.