Anillos, pulseras y pendientes tecnológicos: estas son sus funciones

La tecnología ha irrumpido en el mundo de las joyas, dando lugar a joyas que no sólo cumple con una función meramente estética. Estos son algunos de los extras que traen consigo.

Anillos NFC

Imagine poder controlar su teléfono móvil a través de un anillo. Esto que parece sacado de una película de James Bond es posible y responde al nombre de Orii (82 euros). Este complemento utiliza el control por voz y la conducción ósea para convertir cualquier mano en un teléfono inteligente. Gracias a él, podrá hacer o recibir llamadas tocándose la oreja con el dedo que lleva puesta la joya. Otros, como el NFC Ring (17 euros), permiten bloquear pantallas, controlar aplicaciones o transferir datos en cuestión de segundos. Y, finalmente, el Motiv Ring (166 euros) es capaz de registrar la actividad física, el ritmo cardiaco y la calidad del sueño. Después, envía todos esos datos a una app que sugiere objetivos semanales y diarios en función de los progresos realizados. Para ello, cuenta con un sensor óptimo y un acelerómetro de tres ejes. De momento, tan sólo está disponible para iOS.

Pulseras musicales

SoundMoovz (15 euros) es una pulsera inteligente capaz de componer música basándose en el movimiento corporal o el baile de sus usuarios. Para ello, se sincroniza a través de bluetooth con una aplicación compatible con terminales Android e iOS. Este ‘wearable’ está diseñado con una interfaz fácil e intuitiva para que pueda ser utilizado por todo tipo de públicos. Para activarlo, basta con ponérsela en las muñecas o tobillos, enlazarla con el ‘smartphone’ y designarle los efectos deseados. No hay que perder de vista que la base de datos de este dispositivo incluye más de 400 efectos de sonido diferentes e incorpora un sistema de autograbación que permite añadir otros tantos adicionales. No obstante, es sincronizable con las plataformas Spotify y Apple Music para utilizar las bases de canciones ya existentes. Además, el aparato cuenta con un reproductor propio destinado a escuchar toda la música que, poco a poco, se vaya creando.

Pendientes ‘fit’

BioSensive Technologies ha desarrollado unos pendientes que permiten al usuario conocer su presión arterial, las calorías consumidas y todo el ejercicio realizado. A diferencia de las pulseras cuantificadoras existentes en el mercado, este artilugio se coloca en el lóbulo de la oreja, combinando moda y ciencia en un mismo producto. Su nombre es Ear-O-Smart (110 euros) y tiene un tamaño de 16 milímetros. Incorpora un monitor de fitness que utiliza técnicas PPG (photoplethysmogram) para calcular el pulso a través del flujo sanguíneo de la piel. Así, la luz que emite a través de un LED captura exactamente la velocidad y el momento en que éste pasa por el lugar analizado. Sin embargo, uno de los problemas que viene siendo habitual en este tipo de tecnología ultraportátil es la duración de la batería. En este caso, se calcula una autonomía de ocho horas, aunque la ‘start up’ asegura que está trabajando para mejorar este aspecto.