Tecnologia militar

Los auriculares tácticos y con IA que comenzarán a usar los militares

Es compatible con la certificación MIL-STD-810H, lo que significa que puede estar sumergido durante 2 horas a 2 metros de profundidad y puede resistir una amplitud térmica de casi 100°C.

Auriculares militares
Pueden usarse con cascos y con máscaras antigas.INVISIOINVISIO

Hay dispositivos que necesitan cumplir con los estándares de exigencia más altos debido al uso al que serán sometidos. Una de esas pruebas es la certificación MIL-STD-810H, una serie de evaluaciones desarrolladas por el laboratorio de pruebas del Ejército de Estados Unidos. ¿El objetivo? Someter los dispositivos a las condiciones más extremas. Y son las que han pasado los auriculares tácticos X7, dotados con un sistema de inteligencia artificial.

Desarrollados por INVISIO, los X7 incluyen un diseño ergonómico perfeccionado para adaptarse al oído durante horas. Incorpora una selección de tres fundas diferentes de forma ergonómica, una selección de diferentes almohadillas para los oídos y puntas de espuma moldeadas a medida. Pesan apenas 47 gramos, pueden estar sumergidos 2 horas a 2 metros de profundidad (tanto en agua dulce como salada), resisten temperaturas que van de los 60ºC a los 33º bajo cero durante cuatro horas y pueden pasar de una a otra en menos de un minuto sin consecuencias.

Tienen un sensor de captación de voz (VPU) integrado que capta las vibraciones del oído interno y las transforma en voz sin la necesidad de un punto de contacto interno específico. Sus micrófonos auditivos están ubicados en el contorno del oído externo, utilizando su capacidad para detectar el origen de los sonidos y así recibir el sonido en 360 grados.

La incorporación de IA brinda también algunas ventajas: adapta automáticamente el volumen al sonido exterior, mejora la calidad de la voz para adaptarse a las circunstancias, tiene diferentes modos de escucha y procesamiento de señalización digital, lo que incluiría evitar señales de interferencia.

Son compatibles con el uso de cascos tácticos, máscaras antigás y otros sistemas respiratorios. Su certificación militar los hace también resistente a disolventes, a la congelación y puede operar por encima de los 4.000 metros de altura sin problema.