La realidad aumenta hasta otra dimensión

Una nueva tecnología permite incorporar información digital sobre una vista del mundo real, lo que hará la vida más fácil

Visitar un supermercado y saber qué alimentos están preparados para celíacos con sólo pasear por el pasillo, mirar los escaparates de las tiendas y ver publicidad personalizada, obtener indicaciones de cómo ir de un lugar a otro de la ciudad mediante flechas que se superpongan sobre el propio suelo... La realidad aumentada es una tecnología que permite incorporar información digital sobre una vista del mundo real. Y en los próximos años evolucionará gracias a los nuevos dispositivos vestibles, que masificarán su uso a todo tipo de aplicaciones.

«En cualquier momento o lugar podremos estar accediendo a información ampliada». Pablo Ayala, fundador y CEO de Innovae Augmented Reality, afirma que «el mundo será una conjunción entre lo real y lo virtual». La cámara del dispositivo reconoce imágenes o espacios, lo que permite mostrar en pantalla objetos generados por ordenador y simular que se encuentran integrados en los mismos, de manera que el usuario dispondrá de información contextualizada y ubicua.

Esta revolución, que reside en la posibilidad de aprovecharla sin necesidad de tener entre las manos un dispositivo móvil, puede ser el siguiente gran salto tecnológico. Google, con «Project Tango», y Apple, que este año apostará con fuerza por la realidad aumentada, tratarán de cambiar significativamente nuestro día a día, «consiguiendo que veamos literalmente el mundo con otros ojos», remarca Unai Extremo, CEO de Virtualware. A través de dispositivos colocados frente a las retinas, como gafas o pequeños visores –Samsung trabaja incluso en unas lentillas–, «podremos obtener información añadida de aquello donde nos encontremos».

En el ámbito laboral, la realidad aumentada permitirá asistir por control remoto a operarios que trabajen en una obra, indicar en tiempo real los pasos que deben seguir, mostrar el lugar exacto donde colocar cada elemento e incluso celebrar reuniones con hologramas de compañeros sin necesidad de desplazarse. En el educativo, los alumnos podrán explorar modelos detallados del cuerpo humano, construcciones históricas o reacciones químicas sin salir del aula. «Las posibilidades son casi ilimitadas. Dependerá de cómo se diseñen estos dispositivos, y de su software, para que se integren en nuestra vida de la forma menos intrusiva posible», revela Extremo.

Pero es en el ámbito sanitario donde se verán algunas de las aplicaciones más interesantes. Y es que los cirujanos podrían usar visores de realidad aumentada para ver «a través» del cuerpo de su paciente mientras practican una intervención.

Entre los distintos campos en los que actualmente se utiliza la realidad aumentada, Ayala piensa que los más interesantes son el marketing y la comunicación, donde permite ofrecer información mejorada de un producto; y la industria 4.0. Por su parte, Extremo asevera que la aparición de nuevos dispositivos que simplifican el consumo de esta tecnología está haciendo que se empiecen a crear las primeras experiencias «serias» en el ámbito industrial, en el que estos sistemas ofrecen información contextual que ayuda a reducir los tiempos de operación y mejora la eficiencia.

De la necesidad de ofrecer información móvil a la conveniencia de que ésta pueda contextualizarse. Tras el éxito de Pokémon Go, el consejero delegado de Facebook, Mark Zuckerberg, catalogó la cámara de fotos como la principal plataforma de realidad aumentada. Sin embargo, Ayala cree que no será algo que se pueda monopolizar. «Las principales compañías del mundo tendrán su versión de oferta de servicios en formato de realidad aumentada, al igual que actualmente cada uno tiene su página web. De momento, Facebook no está bien posicionada en este campo. Han llegado tarde y algunos de sus competidores como Apple, Microsoft o Google llevan más tiempo invirtiendo en esta área». No obstante, cuenta con una ventaja, la masa social, y su pretensión de facilitar a los desarrolladores la posibilidad de llevar sus creaciones tanto a ese gran público como al mundo empresarial, donde la realidad aumentada tiene mayor potencial que en el entretenimiento.

La aparición de las «Google Glass» supuso un empujón a la industria, que ha llevado a Microsoft a apostar por esta tecnología creando «HoloLens», un dispositivo que pretende revolucionar el mercado. Es más, se estima que el volumen global de negocio de la realidad aumentada en 2020 alcanzará los 120.000 millones de dólares, mientras que el de la realidad virtual apenas llegará hasta los 30.000 millones. Se trata de un volumen de mercado conjunto que supondrá un 50% de lo que supone hoy en día el negocio de los smartphones –incluyendo venta de terminales y apps–.

Extremo cree que, quizá, algunas soluciones de realidad aumentada se incorporen en los móviles, siempre y cuando los contenidos sean de valor añadido y sirvan de ayuda en las tareas diarias. Estas herramientas ofrecerán «experiencias agradables y útiles que simplificarán nuestras vidas y nos ayudarán a mejorar enormemente la eficiencia en nuestros puestos de trabajo».

NUEVO CONCEPTO DE SALPICADERO

La realidad aumentada también tendrá su impronta en el ámbito automovilístico. Volkswagen presentó en el último CES Las Vegas las tecnologías que conseguirán que el control del vehículo sea mucho más intuitivo y que el conductor pueda acceder con la máxima seguridad y facilidad a toda la información del coche. Transforman el concepto del salpicadero y evitan que el conductor tenga que desviar la mirada de la carretera. Y es que mientras que el nuevo «Head up Display» con realidad aumentada proyecta información frente al automóvil, integrándola con el entorno, un nuevo «Digital Cockpit» será capaz de ofrecer más información de manera natural, de tal forma que con el seguimiento ocular los datos se mostrarán cuando se fija la mirada en una zona de la pantalla.