Jornadas

La URJC aviva la llama de los medios convencionales

Colaboradores de LA RAZÓN como M. J. Navarro, Fernando Vilches o Javier Sierra, en la Semana de la Comunicación

Maria Jose Navarro y Goyo Gonzalez en las ponencias de la Semana de la Comunicacion en la URJC
Maria Jose Navarro y Goyo Gonzalez en las ponencias de la Semana de la Comunicacion en la URJCDavid JarLa Razon

La Universidad Rey Juan Carlos se sigue consolidando como referente en la defensa del derecho a la información con iniciativas como la Semana de la Comunicación, que concluye hoy con su quinta jornada. Han pasado por su Salón de actos nombres ilustres de la comunicación como Josep Pedrerol, quien aseguró durante su intervención que incluso estudió la carrera de Periodismo dos veces. Los alumnos de Periodismo y otras ramas de la comunicación llevan toda la semana aprovechando la oportunidad de hacer todo tipo de preguntas a profesionales de grandes medios de comunicación.

Diversos ponentes de la altura del Premio Planeta y colaborador de LA RAZÓN Javier Sierra compartió con los estudiantes los orígenes de su doble vocación por la información y la escritura, evocando a la necesidad antropológica de contar y consumir historias. Posteriormente, ayer Fernando Vilches, Codirector de estas jornadas junto a Javier Becerra, expuso su disertación «ComunicArte», recordando las dos funciones esenciales del arte de comunicar: educar y entretener.

Televisión y radio

En la jornada de ayer se celebró el coloquio entre dos de los medios tradicionales más emblemáticos: la radio y la televisión. Ambos soportes estuvieron personificados en Goyo González y María José Navarro. Goyo, conocido especialmente por su trabajo en Telemadrid es un apasionado de la televisión. No es que haga de menos a la radio, pero no concibe su profesión sin la tele. Goyo es un showman y por tanto, disfruta con el lenguaje televisivo que conlleva el entretenimiento. Sabe cantar, bailar, interpretar, no tiene miedo al desgaste que implica la televisión. Nunca tiene pereza para esas larguísimas horas de grabación que exige la televisión, ni para las condiciones elefantiásicas de un directo. La televisión le atrapa, le gusta, le mete una adrenalina que Goyo necesita para sentirse completo. Es verdad que echa de menos algunos formatos que no cree que hayan pasado ni mucho menos de moda, como pueden ser los concursos culturales, pero siempre tiene ganas de cámara. Cuando no tiene tele se siente inquieto, como al que le quitan su medio natural. De hecho, ahora está virando su trayectoria en imagen hacia la gastronomía para adaptarse a los nuevos tiempos que llegan y se está haciendo un hueco importante entre los prescriptores en Instagram.

María José Navarro, sin embargo, es niña de radio. Su padre, un radiofonista clásico, la acostumbró a corretear por los estudios de la Cadena Ser en Albacete, a entrar en la discoteca, a contemplar los programas. No era su vocación pero acabó siendo su devoción. Era su medio natural. De esa confianza nació su profesión, que inició a los 16 años en Radio Albacete. Hizo de todo. Desde las pautas de la publicidad, hasta el control de informativos, hasta pinchar 40 Principales. A los 18, una llamada de la Cadena Cope la convirtió en competencia de su propio padre. A partir de ahí, dirigió los informativos de Castilla-La Mancha, de Murcia, hasta que en 1992 acabó en Cope Madrid. Ha dirigido algunos programas de la cadena pero, sobre todo, presume de haber aprendido de los mejores: Antonio Herrero, Luis Herrero, Carlos Herrera. Por si fuera poco ha hecho incursiones en televisión. Ha colaborado en varios programas de TVE y durante tres años estuvo en Telemadrid, además de ser colaboradora de LA RAZÓN.

Ella tiene clarísimo que no cambiaría la radio por ninguna otra oportunidad. El lenguaje de la radio, accesible, pequeño, artesano, cercano, jamás podrá compararse al de la tele. La tiranía de la imagen es incómoda y condiciona todo lo demás. Los indios americanos decían que un espejo te roba el alma. A ella le pasa lo mismo con la cámara.

A otras magníficas intervenciones, como la del «periodista todoterreno» Miguel Ángel Rodríguez, se sumará hoy en la clausura las de los periodistas y comunicadores Agustín Bravo, Raquel Pinilla o Ángel Expósito, reconocido por su trabajo en el programa de radio «La Linterna».