«Apostamos por una remodelación austera sin derribar El Plantío»

Cinco millones de euros. Este será el «austero y razonable» presupuesto del que dispondrá el Ayuntamiento de Burgos para finalmente remodelar, al término de la Feria de San Pedro 2014, y no derribar la plaza de toros de El Plantío en Burgos. «No podíamos esperar más tiempo para tomar una decisión: ya habíamos descartado tanto el derribo y construcción del Burgos Arena –recinto multiusos–, porque su coste de 23 millones de euros se escapaba de los presupuestos; como la concesión bajo concurso de obra pública a una empresa con derecho a explotación durante 25 años», contextualiza el teniente alcalde de la capital burgalesa, Ángel Ibáñez, antes de detallar la hoja de ruta para los próximos meses.

Así, «en apenas diez días decidiremos entre las dos ofertas presentadas –Serolo y Zúñiga– para esta temporada únicamente, estamos pendientes de un informe técnico de la Universidad de Burgos para garantizar la normativa de seguridad, que se podrá cumplir realizando algún apuntalamiento, y la feria se realizará sin problemas».

Para abril, el consistorio espera «tener ya el proyecto definitivo y realizar la adjudicación mediante un concurso de obra pública en torno a los meses de junio-julio para, en cuanto terminen las corridas de toros este año, comenzar con las obras y tratar de encajar los plazos para que en 2015, salvo imprevistos, se celebre San Pedro en El Plantío con la plaza ya finalizada», detalla Ibáñez resaltando que «a la par se llevará a cabo un nuevo pliego para la gestión taurina del coso de ese año y posiblemente dos o tres más».

El proceso de remodelación «incluirá una cubierta para poder albergar espectáculos de todo tipo y dotar de mayor vida al recinto el resto del año». «Es una solución intermedia, que se acerca al proyecto del Burgos Arena, y totalmente asumible para los 200 millones de presupuesto anual que maneja nuestra ciudad, además los técnicos coincidían en que la vida útil del inmueble actual se agotaba, sobre todo, por las malas condiciones climatológicas que traían consigo una considerable entrada de aguas y humedades durante los meses de invierno», explicó el teniente alcalde de la ciudad castellana.

Además de la remodelación, no sólo saneando sino también apuntalando con nuevos materiales el esqueleto del inmueble, y la colocación de la cubierta -aún por definir si fija o retráctil-, también se realizará una adecuación de los accesos y de los asientos, para una mayor comodidad de los espectadores.

Este aspecto se traducirá en un daño colateral para la afición burgalesa, ya que la actual capacidad del coso de El Plantío se verá reducida ligeramente. En concreto, pasaría de las casi doce mil personas que puede albergar actualmente a unas diez mil aproximadamente.