Un fa menor

No, si es normal que, ante la falta de ideas originales, Hollywood eche un vistazo a la televisión para ver si se le enciende la bombilla. Y más, con series tan arrolladoras como la primera temporada de «Glee», en la que un puñado de «frikis» montan un grupo musical mientras sufren los problemas típicos relacionados con la aparición del acné. En «Dando la nota» nos topamos de nuevo con las bandas a capela y una panda de chicas desatadas por distintas razones y dispuestas a demostrarles a los del bando contrario que, cuando queremos, no hay gallo que se resista. Salpicada de algún «gag» escatológico (esas desmesuradas vomitonas) o políticamente incorrecto («yo me llamo Amy la gorda para que no lo hagan antes zorras anoréxicas como tú», dice la chica de la foto), las aguas, sin embargo, nunca llegan a desbordarse en esta entretenida e inofensiva peliculita que disfrutarán básicamente otros chicos y chicas en la edad del pavo. ¿Porque quién, con esos años, no acabó dando el cante alguna vez?