Cercanías

La lección a gritos de un maquinista a los viajeros que cruzaron las vías andando: "¿Tanto cuesta esperar dos minutos? Un respeto a las muertes"

El conductor de la línea R2 se vio obligado a levantar la voz y recordar, indignado, la muerte semanas atrás de cuatro adolescentes por la misma acción

Dentro de la cabina del maquinista de la C-9 de cercanías entre Cercedilla Navacerrada y Cotos.
Dentro de la cabina del maquinista de la C-9 de cercanías entre Cercedilla Navacerrada y Cotos.Jesús G. FeriaLa Razon

Apenas dos semanas después de que cuatro jóvenes perdieran la vida arrollados por un tren en Montmeló (Vallés Oriental) tras haber cruzado andando por las vías en un tramo en el que está prohibido, un maquinista ha tenido que levantar la voz y dar una lección a los usuarios.

El pasado miércoles, un conductor de la línea R2 de Cercanías observó a varios viajeros cruzando por las vías por las que él circulaba con el convoy a la altura de Montcada i Reixac (Vallés Occidental).

Su reacción inicial fue hacer sonar hasta en ocho ocasiones la bocina con el fin de advertir a estas personas del peligro y la imprudencia que supone cruzar por delante del tren.

Una vez se subieron a su tren, el maquinista no pudo evitar expresar la rabia y la indignación que le produjo esta acción y decidió echarles una fuerte bronca por la megafonía. En su regañina ha recordado en todo momento a las cuatro personas que murieron por estos mismos días atrás.

"Seguimos cruzando el paso a nivel", repitió dos veces, visiblemente alterado por el hecho. "Me parece una falta de educación y de respeto para las personas que trabajamos todos los días", continuó abroncando lleno de razón.

“¿Qué hay que hacer? ¿Paro el tren; llamo a la policía? Un poco de respeto a las muertes”, se cuestionó retóricamente este trabajador, para después recordar a los usuarios implicados que "cuatro personas adolescentes murieron hace dos semanas" y pedirles "un poco de respeto".

En medio de un silencio sepulcral que reinó en los vagones durante toda su intervención a gritos, acabó por decir: "¿Tanto cuesta esperar dos minutos a que haya pasado el tren?"