Sucesos

Más de medio centenar de personas se concentran en Córdoba en repulsa de la sentencia contra ‘La Manada’

Las manifestantes prevén reunirse de nuevo hoy a las 21:00 horas en Pozoblanco

Concentración de apoyo a la víctima que denunció abusos de miembros de 'La Manada'
Concentración de apoyo a la víctima que denunció abusos de miembros de 'La Manada'larazonEUROPA PRESS

Más de medio centenar de personas, convocados por la Plataforma Cordobesa contra la Violencia a las Mujeres, se han concentrado este jueves en la Plaza de las Tendillas de la capital en repulsa por la sentencia del Juzgado de lo Penal número 1 que condena a penas de entre dos años y diez meses y cuatro años y seis meses de prisión a cuatro miembros del grupo de WhatsApp de 'La Manada' por abusos sexuales sobre una joven en mayo de 2016 en la localidad cordobesa de Pozoblanco.

Estos hechos ocurrieron con anterioridad al caso de los Sanfermines de 2016, por el que ya han sido condenados a 15 años de cárcel por violación junto a un quinto miembro más del grupo.

En concreto, los asistentes han portado pancartas y vestimenta morada manteniendo en todo momento las distancias de seguridad ante la actual situación y expresando mediante diversas consignas su postura opuesta al fallo judicial conocido este jueves. En algunos momentos ha habido presencia policial. A las 21:00 horas de este viernes prevén una concentración en Pozoblanco, municipio de origen de la joven víctima.

Según apuntan desde el colectivo, "nuevamente la justicia patriarcal se pone del lado del agresor": de ahí que convoquen a la concentración con los lemas "sin justicia, no hay igualdad", así como "ante agresiones patriarcales, respuesta feminista" y "en apoyo a nuestra hermana de Pozoblanco".

Además, teniendo en cuenta el estado de alarma decretado en el país por el coronavirus, recomiendan "conservar la distancia de dos metros y las medidas de seguridad social" implantadas a tal efecto.

En este sentido, decenas de mujeres, convocadas por la Plataforma Cordobesa contra la Violencia a las Mujeres, se concentraron en las puertas de la Ciudad de la Justicia de Córdoba en apoyo a la joven el día que declaró en el juicio en noviembre.

Al respecto, las mujeres lanzaron distintas soflamas destacando que la víctima "no está sola, aquí está tu manada", a la vez que subrayaron que "no es un caso aislado, que esto se llama patriarcado".

De este modo, condenaron "todas las violencias machistas y que nos encontramos con una justicia patriarcal, que no es consciente de que hay muchas formas de intimidación y violencia por el simple hecho de ser mujer".

Mientras, la joven que denunció los hechos se mostró "clara, concisa y coherente" en su declaración, en la que ratificó "lo fundamental" de la denuncia interpuesta tras conocer la existencia del vídeo por la Policía Foral de Navarra.

Así lo confirmaron desde la acusación particular, al tiempo que aseveraron que la joven fue "contundente", aunque admitió que en un primer momento no recordó lo ocurrido en el coche, pero posteriormente fue consciente de los hechos, respaldados por la grabación.

El Juzgado de lo Penal número 1 de Córdoba ha condenado a dos años y diez meses de cárcel a tres de los cuatro acusados miembros del grupo de WhatsApp de 'La Manada' por abusar sexualmente en mayo del año 2016 de una joven en la localidad de Pozoblanco y de grabar los hechos con un teléfono móvil propiedad de uno de ellos.

Al cuarto de los procesados le ha impuesto una pena de cuatro años y seis meses de prisión al considerar probado que fue quien difundió las imágenes grabadas a través de dos grupos de WhatsApp de los que formaban parte tanto los investigados, como terceras personas ajenas a los hechos enjuiciados.

En la sentencia, notificada este jueves a las partes personadas en el procedimiento y facilitada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), el magistrado condena a cada uno de los cuatro investigados por un delito de abusos sexuales a un año y seis meses de prisión, la prohibición de comunicarse o aproximarse a menos de 500 metros de la víctima durante cuatro años y la medida de libertad vigilada consistente en la fijación de estas mismas prohibiciones durante un año a cumplir tras la pena de cárcel.

El juez explica que el delito de abusos sexuales del artículo 181.1 del Código Penal contempla una pena de uno a tres años de prisión o multa de 18 a 24 meses, precisando que, en este caso concreto, "las circunstancias personales de los acusados, quienes con posterioridad a estos hechos llevaron a cabo una conducta ilícita de mayor gravedad aún, los hechos cometidos en Pamplona y cuya notoriedad pública ha sido muy importante, llevan a considerar que la consecución de los fines de prevención especial de la pena determinan la necesidad de una pena en extensión superior al mínimo legal", imponiendo así a cada uno de ellos un año y medio de prisión por dicho delito.

Asimismo, condena a tres de los acusados a un año y cuatro meses de cárcel, multa de 3.600 euros y la prohibición de comunicarse o acercarse a una distancia inferior a 500 metros de la joven por un plazo de cuatro años por un delito contra la intimidad, delito por el que impone al cuarto de los encausados, J.A.P.M., tres años de prisión y la misma prohibición de comunicación y aproximación al aplicar en este caso el subtipo agravado por la difusión de las imágenes a través de los referidos grupos de WhatsApp.

El juez, de igual modo, condena a A.J.C.E. al pago de una multa de 240 euros por un delito leve de maltrato. En concepto de responsabilidad civil, los cuatro investigados deberán indemnizar conjunta y solidariamente a la víctima con un total de 13.150 euros --10.000 euros por el perjuicio moral causado y 3.150 euros por los días durante los que sufrió un perjuicio personal básico--, una cantidad que fija teniendo en cuenta la experiencia jurisprudencial al respecto en cuanto a las respuestas dadas por otros órganos de la Administración de Justicia en supuestos de la misma naturaleza.

El exagente de la Guardia Civil A.M.G.E. se encuentra en la cárcel de Sevilla I; J.A.P.M., en Puerto III, en El Puerto de Santa María (Cádiz), y los otros dos procesados en este caso, A.J.C.E. y J.E.D., están internos en los centros penitenciarios de Topas, en la provincia de Salamanca, y Huelva, respectivamente.