España pierde población

La despoblación avanza: la mitad de los municipios ha perdido habitantes en los últimos 20 años

El Defensor del Pueblo Andaluz alerta de la «exclusión financiera» y «la falta de recursos sanitarios» en los núcleos rurales

Vista de La Alpujarra granadina, una zona fuertemente afectada por la despoblación
Vista de La Alpujarra granadina, una zona fuertemente afectada por la despoblaciónLA RAZÓNLA RAZÓN

La despoblación no es un fenómeno exclusivo de la meseta. Los pueblos de Andalucía también están experimentando una paulatina fuga de habitantes hacia las ciudades en busca de mejores oportunidades. El Defensor del Pueblo Andaluz ha puesto la lupa en esta dinámica en su informe de 2019, exponiendo un dato revelador: la mitad de los municipios andaluces ha perdido habitantes en los últimos 20 años. La oficina que dirige Jesús Maeztu se basa en cifras de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP), que expone que las zonas escasamente pobladas –menos de 50 habitantes por kilómetro cuadrado– ocupan el 65,9 por ciento del territorio andaluz.

Un total de 73 municipios están por debajo de los 8 habitantes por kilómetro cuadrado y el 70 por ciento ha perdido población respecto a 1960, un total de 534 pueblos. Otro dato significativo es que el 90 por ciento de los núcleos de población de Andalucía son municipios rurales de menos de 5.000 habitantes.

El Defensor muestra su «preocupación» por el impacto de este fenómeno, ya que tiene como objetivo garantizar el «cumplimiento de los derechos sociales de los andaluces con independencia del territorio en el que vivan». Por ello, remarca que no es una percepción «teórica», dado que la oficina recibe quejas de personas que habitan en zonas rurales y también el propio departamento ha comprobado las necesidades «in situ».

Apunta el Defensor que «seguimos detectando preocupaciones en los padres que reclaman un centro educativo cercano». También alerta de «falta de recursos» en la atención médica y señala la necesidad de incrementar la dependencia y actividades de envejecimiento activo en los ancianos.

Otro problema que subraya es la «exclusión financiera». «Vecinos de estas comarcas se ven obligados a desplazarse a otras localidades para realizar sus gestiones bancarias ante la desaparición de oficinas locales». El Defensor asegura que existe un porcentaje «importante» de la población que, por razones de edad, «carece de una mínima cultura digital y el acceso a los medios electrónicos les resulta complicado».

Esta preocupación también ha sido detectada por los ayuntamientos, diputaciones y las principales entidades financieras radicadas en Andalucía, «con una propuesta amplia de soluciones». «Se está promoviendo la colaboración para el estudio conjunto de soluciones» en este ámbito.

Junto a ello, el Defensor critica el «aislamiento» que produce «el mal estado o carencia de infraestructuras de comunicación, viarias o ferroviarias». Muchos de los jóvenes de estos núcleos se ven obligados a trasladarse a la ciudad para encontrar un empleo. En este sentido, señala «falta de políticas de formación» en este colectivo, una circunstancia que se agrava con el «abandono de las actividades agrarias o ganaderas tradicionales que suponen no sólo un estilo de vida a conservar, sino un posible yacimiento de empleo».