Documental

National Geographic se adentra en el origen de Tartessos

“La civilización perdida” se centra en la que se cree que es una de las civilizaciones más antiguas que poblaron Europa

Piezas del tesoro del Carambolo / Foto: Manuel Olmedo
Piezas del tesoro del Carambolo / Foto: Manuel Olmedolarazon

El canal de documentales National Geographic España ha estrenado una estrenado una nueva producción en la que el arqueólogo onubense becado por National Georgrafic Claudio Lozano Guerra-Librero recorre algunos lugares de Andalucía occidental y Extremadura en busca de los últimos hallazgos sobre Tartessos.

Bajo el título “Tartessos: la civilización perdida” la cinta se centra en la que se cree que es una de las civilizaciones más antiguas que poblaron Europa, ha informado el canal en un comunicado.

Son muchos los que se ha hecho preguntas como quiénes eran los tartesios y por qué desaparecieron; mezclando historia y leyenda, para algunos la civilización tartesia se menciona en la Biblia y en la Ora Marítima de Avieno, pero lo cierto es que los indicios sitúan al mundo de Tartessos alrededor del río Guadalquivir.

En la cinta, Claudio Lozano viaja a su delta y a Extremadura en busca de respuestas para mostrar los últimos descubrimientos arqueológicos de esta gran civilización que era considerada un mito.

En la Península Ibérica hay numerosos hallazgos arqueológicos que esconden historias apasionantes, muchas de ellas aún sin cerrar.

Aventura, ciencia, nuevas tecnologías se combinan en este documental que propone un viaje al pasado, donde se excava y recrea tecnológicamente la cultura tartésica, para comprender cómo vivieron y desaparecieron.

Para conseguirlo, en la producción de este documental se utilizó la Sala Ideal, una sala de proyección digital en 3D que permite una experiencia inmersiva y dota a este documental de mayor calidad en las imágenes y recreaciones sorprendentes.

Además, el equipo de cámaras de National Geographic ha tenido acceso sin precedentes a museos y yacimientos como el de Casas del Turuñuelo, la mayor novedad dentro de la arqueología tartésica de los últimos años.

Este territorio situado cerca de Mérida, más al norte de lo que se considera el territorio de Tartessos, está excavado únicamente en su 20 %, pero en los últimos años está revolucionando todo lo que se sabía sobre la cultura que fenicios y autóctonos instauraron en la Península Ibérica hace 3.000 años.