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Emergencias

Policías locales y bomberos se «activarán» en caso de catástrofe

Asema coordinará a unos 5.000 efectivos de Protección Civil, Infoca, 112 y del GREA

Rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno en Andalucía Rocío RuzEUROPAPRESS

La Agencia de Seguridad y Gestión Integral de Emergencias de Andalucía (Asema) arrancará el 1 de enero de 2025 con más de 5.000 efectivos y un presupuesto de 270 millones, con el objetivo de que la comunidad esté más preparada ante cualquier emergencia o catástrofe y mejorar la eficacia en la respuesta.

El consejero de la Presidencia, Antonio Sanz, anunció ayer que el Consejo de Gobierno había aprobado los estatutos de esta nueva agencia tras más de un año de trabajo –estaba prevista antes de la dana que azotó Andalucía y especialmente a Valencia– y avanzó el desarrollo de dos normas que permitirán incorporar «a cualquier situación de emergencia» a policías locales y bomberos, «dos colectivos clave», incluso «superando su ámbito actuación geográfica». En caso de necesidad, por tanto, la Junta de Andalucía podrá realizar un «llamamiento» a los 10.000 policías locales que hay en Andalucía, «cumpliendo todas sus funciones», y a los bomberos, cuya incorporación interna quedará regulada, aunque como es sabido ya se desplazan en situaciones catastróficas en el extranjero.

Entre las novedades, Sanz explicó que se creará la agrupación regional de voluntarios de protección civil para contar con más de 7.000 efectivos en caso de necesidad. El consejero detalló también que en 2025 la Junta aprobará la «plataforma integral para la gestión inteligente de emergencias de Andalucía», que permitirá aplicar IA para lograr el control y la supervisión de emergencias desde la administración autonómica, que estará interconectada con todos los ayuntamientos –control de cauces, las previsiones meteorológicas o incendios, entre otras emergencias–.

Igualmente, desde Asema se impulsará la formación y la conciencia social con la puesta en marcha de un decreto de autoprotección para informar y formar a la sociedad en respuesta a las emergencias y se impulsará una red de colaboración con profesionales y expertos, como ingenieros, forenses y arquitectos, entre otros, para que puedan ser activados en caso de necesidad

Como ya era sabido, Asema va a agrupar al sistema de emergencias del 112, como órgano de atención ciudadana y activación de servicios; a Protección Civil, como órgano de coordinación de servicios, planificación y ordenación del voluntariado; al Instituto de Emergencias y Seguridad Pública de Andalucía, como centro de formación y acreditación del personal de emergencias; y al operativo Infoca, como fuerza de intervención en todo tipo de emergencias en el medio natural.

«Se consolida el sistema más moderno y avanzado» de gestión de emergencias de España, que es la que cuenta con más efectivos, ya que la Unidad Militar de Emergencia en España tiene unos 3.500.

La unificación no conlleva la merma de recursos, al contrario, la inversión se amplía y, de hecho, el Infoca contará con 14 millones más y se destinarán 150 millones a modernización de infraestructuras y medios tecnológicos y 17 millones a poner en marcha el plan de gestión inteligente de emergencias y otros 27 millones a la plataforma digital de comunicaciones de emergencias.

La agencia, en la que el Gobierno de Juanma Moreno viene trabajando desde hace bastante tiempo, es necesaria para una región como la andaluza «muy sensible al cambio climático» y, por ello, requiere de una «mayor capacidad de respuesta en las catástrofes y emergencias». La nueva agencia busca «ser más profesional y eficaz a la hora de proteger a los ciudadanos, adaptándose a los desafíos actuales de seguridad».

La Asema tiene como misión «apoyar administrativa y técnicamente la gestión integral de emergencias establecida por la Ley de Gestión de Emergencias en Andalucía, de manera que se aumente la capacidad de respuesta y recuperación de las comunidades, mejorando la calidad de los servicios públicos». En definitiva, «un organismo unificado, tanto para la intervención directa como para la coordinación de recursos en función de la tipología del riesgo».