Comer en la Feria de Sevilla: estas son las casetas más baratas y con entrada libre

La Feria de Sevilla está batiendo récords de asistencia y ya se sabe que la ley de la oferta y la demanda domina cuando hablamos de precios. En general, el que va a la Feria sabe que va a pagar algo más que en un bar que está abierto todo el año, pero aún hay lugares en los que se puede comer a precios aceptables.

Lo primero que hay que decir es que los precios son libres, por lo que cada caseta puede establecer el importe que considere oportuno, pudiendo variar incluso de un día para otro.

Eso sí, tal y como ha recordado la Organización de Consumidores y Usuarios, deberán ser expuestos obligatoriamente al público en un lugar visible (murales, pizarras u otro soporte) sin presentar tachaduras o síntomas de manipulación y serán precios finales, incluidos los impuestos, quedando expresamente prohibida cualquier expresión como “precio según mercado” o similar.

Igualmente, si los precios en barra son distintos de las mesas, deberá hacerse constar ambos en la carta o lista de precios. Además, las cartas o listas de precios se situarán dentro del local en los espacios destinados a la concurrencia del público, quedando prohibida cualquier ubicación que impida la consulta directa y libre, así como la visibilidad y legalidad del contenido.

Ahora bien, entre las 1053 casetas que hay en el recinto ferial, hay algunas más baratas que otras.

Los distritos, parada obligatoria

Entrada libre y precios asequibles. Con esos argumentos, hay que ir sí o sí salvo que tengas caseta propia. Son casetas municipales distribuidas por zonas geográficas y administrativas de la ciudad de Sevilla. Se dividen en distrito Triana – Los Remedios, Casco Antiguo, Nervión – San Pablo Santa Justa, Sur – Bellavista La Palmera, Este-Alcosa-Torreblanca, Macarena – Norte y Distrito Cerro Amate.

Las direcciones son las siguientes: Triana - Los Remedios (Pascual Márquez,153-155-157); Casco Antiguo (Antonio Bienvenida, 97-99-101); Nervión - San Pablo - Santa Justa (Costillares, 22-24-26); Sur - Bellavista - La Palmera (Ignacio Sánchez Mejías, 61-63-65); Este - Alcosa - Torreblanca (Pascual Márquez, 215-217-219); Macarena - Norte (Pascual Márquez, 85-87-89); y Cerro Amate (Juan Belmonte, 196-198-200)

Aquí se puede tomar una cerveza por 1,40 euros y una jarra de rebujito por menos de 8 euros. En la Feria triunfan los montaditos y la tortilla, por los que cobran 2,50 euros y 5 euros respectivamente.

La caseta del Área de Fiestas Mayores del Ayuntamiento de Sevilla (Costillares, 13) y la de la Oficina de Turismo también son buenas opciones.

De todas formas, el precio medio de las casetas, aún siendo más caro que en un bar, tampoco exprime en demasía el bolsillo de los feriantes (otra cosa distinta es la calidad de lo que se ofrece, donde sí existen muchas diferencias entre un lugar y otro). Así, por ejemplo, esta podría ser la carta promedio de una caseta en Sevilla, como la del Club de Campo: 2 euros la cerveza y los refrescos; 3,80 la copa de vino; 12 euros por una jarra de rebujito; 1,50 euros el café; y entre 6,50 y 9 euros los combinados en función de la marca.

En cuanto a la comida, las raciones de mariscos varían en función del peso, pero las de pescado frito oscilan entre los 13 euros de los chocos y los 15 euros de las puntillitas. El jamón y la caña de lomo cuesta en torno a 20 euros la ración y los platos de solomillo al whisky o carrillada están en torno a 16 euros. El caldito, que no puede faltar, cuesta dos euros.

Sobre la calidad y la cantidad, cada caseta es un mundo, pero ya se sabe que si la asistencia es multitudinaria, lo normal es que ambas cuestiones se resientan.