España

«Tomar azúcar no cuenta con ningún beneficio»

Eliminar alimentos como la bollería o las galletas disminuiría el colesterol, no tanto por la cantidad dulce que reduces, sino por el tipo de producto que es y como está elaborado.

Jualia Ferré, dietista y nutricionista
Jualia Ferré, dietista y nutricionistalarazon

-Si no se toma azúcar durante un mes, ¿desciende la presión arterial?

-Depende. Una persona que tiene niveles correctos o bajos de tensión arterial lo más seguro es que no note ningún cambio en su tensión. Sin embargo, un paciente hipertenso sí se podría beneficiar en este sentido, ya que probablemente se produciría una bajada de peso que casi siempre va acompañada de una disminución de la tensión arterial. Todos deberíamos evitar al máximo el consumo de azúcar añadido, pero alguien con una enfermedad que aumenta el riesgo cardiovascular, como es la hipertensión, todavía más.

-¿También mejorará el colesterol?

-No tiene una relación directa, y en un período de tiempo tan corto como es un mes, los niveles de colesterol dependen muchos factores. Sí disminuirían los niveles de triglicéridos en sangre si evitamos el consumo de azúcar simple o añadido. En el caso de que dejar de tomar azúcar vaya ligado a eliminar alimentos como la bollería o las galletas sí disminuiría el colesterol, pero no solamente por la reducción del azúcar sino por la eliminación de este tipo de productos.

-¿Tendremos sensación de hambre?

-No. En cambio, sí puede aumentar nuestro deseo por consumir azúcar por el hecho de habérnoslo prohibido y quererlo evitar. Puede incluso que lo queramos consumir más que cuando no habíamos pensado en dejar de comerlo. No es una reacción física, sino psicológica y muy habitual.

-¿Y tiene alguna ventaja?

-Consumir azúcar blanco o refinado añadido no tiene ninguna ventaja para nuestra salud física. Sí puede ser positivo para nuestra salud mental y nuestra satisfacción personal. Por ejemplo, poder tomar un chocolate a la taza en invierno o un helado en verano. Podemos ingerir cantidades moderadas de vez en cuando que nos hagan disfrutar sin que tenga un perjuicio directo sobre la salud.