Sucesos

El hombre fallecido en una avioneta en Sóller junto a su hijo era piloto de caza de las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos

Las víctimas había despegado unas dos horas antes del aeródromo de Binissalem, donde la aeronave había permanecido estacionada durante una larga temporada

Un helicóptero rescata a uno de los tres ocupantes de la avioneta que cayó en Tenerife
Una avioneta, en una imagen de archivolarazon

Mallorca ha sido escenario este fin de semana de una tragedia aérea que ha conmocionado a la comunidad local e internacional. Charles Michael Gordon, un experimentado piloto estadounidense de 60 años, y su hijo Maximilian, de tan solo 13, perdieron la vida este sábado por la tarde tras precipitarse al mar la avioneta acrobática en la que viajaban frente a la costa del Puerto de Sóller.

El accidente tuvo lugar sobre las 20 horas, a escasa distancia del faro de Sóller y en aguas de unos 30 metros de profundidad. La aeronave, un modelo RV-4 biplaza especialmente modificado para realizar maniobras acrobáticas, había despegado unas dos horas antes del aeródromo de Binissalem, donde había permanecido estacionada durante una larga temporada.

La llamada de emergencia llegó al 112 a las 20:07 horas. Varios testigos que navegaban en embarcaciones por la zona alertaron al ver cómo el avión se precipitaba al mar a unos 100 metros de la costa.

Un gran operativo de búsqueda

De inmediato, se activó un operativo de emergencia liderado por la Guardia Civil, con la participación del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS), Salvamento Marítimo, Bomberos de Mallorca, efectivos del Ejército del Aire y la Armada. El centro de mando se instaló en la base militar del Puerto de Sóller para coordinar las tareas de rescate.

Las condiciones marítimas y la caída del sol complicaron las labores de búsqueda durante la noche. Sin embargo, en la mañana del domingo, buzos del GEAS lograron localizar y recuperar los cuerpos sin vida del piloto y su hijo, que fueron trasladados al puerto para proceder con el levantamiento judicial y las diligencias forenses.

Charles Gordon no era un piloto cualquiera. Según ha publicado este , fue piloto de caza en las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos, y tras su jubilación se dedicó a la aviación acrobática, participando en espectáculos aéreos en varios países.

Llegada a Mallorca cruzando el Atlántico

Su pasión por volar lo llevó a traer su avión a Europa cruzando el Atlántico desde Estados Unidos, haciendo escala en Terranova antes de llegar a Mallorca el pasado verano.

Durante meses, su aeronave permaneció en Binissalem, desde donde partía para exhibiciones por Europa. Este verano había regresado a la isla, su destino favorito para pasar la temporada estival y practicar maniobras en el aire.

Según las primeras hipótesis, el accidente se habría producido durante una de estas maniobras de entrenamiento acrobático. Las investigaciones siguen abiertas, y se trabaja en determinar si se trató de un fallo mecánico, un error humano o una combinación de factores.

Un profesional experimentado y apasionado

La tragedia ha causado una profunda conmoción, especialmente entre los aficionados a la aviación, que conocían a Gordon como un profesional experimentado y apasionado. Su hijo Maximilian, que lo acompañaba en el vuelo, también compartía la afición por la aviación. Ambos disfrutaban del vuelo como una actividad compartida y habitual.

Mallorca, un destino turístico y de descanso, se viste hoy de luto tras esta triste pérdida que ha tocado el corazón de la isla. Las autoridades han trasladado sus condolencias a la familia y continúan las tareas de investigación para esclarecer lo ocurrido en uno de los accidentes aéreos más trágicos que se recuerdan en la zona.