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Una madre que asesinó a su hijo recién nacido en un bar de Albacete podría ser indultada por el Tribunal Supremo

El alto tribunal relata que esta mujer se encontraba "en unas circunstancias límite que condicionaron la evaluación de sus actos"
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  • Graduado en periodismo por la Universidad Rey Juan Carlos y master en dirección de protocolo y diseño de eventos por la Universidad Camilo José Cela. Apasionado de la comunicación. Ha trabajado en gabinetes de prensa de eventos de renombre como los Premios

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Una mujer de 32 años que asesinó a su hijo recién nacido en un bar de Albacete podría ver reducida su condena tras la última decisión del Tribunal Supremo que ha propuesto indultar parcialmente su condena. En este sentido, pasaría de prisión permanente revisable a una pena de prisión por debajo de los 20 años que según el alto tribunal "puede resultar adecuada acorde a las circunstancias" del caso.
Cabe señalar que en un primer momento, la Audiencia de Albacete condenó a esta madre a 20 años de prisión aunque fue el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha quien elevó su pena a prisión permanente revisable. Tras esta decisión, la mujer condenada recurrió al Tribunal Supremo quien este lunes ha emitido su propuesta de volver a la condena de 20 años.
El asesinato se produjo el 10 de octubre del año 2020, en un almacén anexo a un establecimiento hostelero de la ciudad de Albacete donde la mujer dio a luz y arrebató la vida al bebé asfixiándolo con una bolsa de basura. Posteriormente introdujo el bebé y su placenta en otra bolsa y los dejó junto a otras bolsas de basura que había en dicho lugar.
La mujer ensangrentada, pidió auxilio a un amigo argumentando a los servicios sanitarios que se le había explotado un bulto y que por eso estaba sangrando abundantemente. Sin embargo, tras el análisis de la ginecóloga, esta señaló que había indicios y síntomas de un parto y advirtió a la Policía Nacional.
Durante la madrugada del día posterior, el cuerpo sin vida del recién nacido fue hallado y los agentes procedieron a detener a la madre como presunta autora de un delito de asesinato con la agravante de parentesco.
Esta mujer ya había sufrido varios abortos, concretamente tres: Uno por causa natural y otros dos voluntario. Además, durante este último embarazo, esta mujer intento abortar de nuevo ingiriendo una conocida sustancia abortiva aunque no consiguió acabar con la vida del bebé por esa vía.
El Supremo relata que esta mujer se encontraba "en unas circunstancias límite que condicionaron la evaluación de sus actos" por tanto "su comportamiento se desarrolló inmediatamente después de pasar por los dolores de un parto, carente ella de toda asistencia y en un contexto en el que su nueva determinación delictiva se simultaneó con la voluntad de ocultar su responsabilidad, así como con la necesidad de atender a su propia supervivencia y reclamar el socorro que se exigía para superar la fuerte hemorragia que sufrió", señala el alto tribunal.
Estas condiciones y circunstancias en las que se encontraba dicha mujer sirve para que el tribunal pueda concederla un indulto parcial para que su pena de prisión sea menor a los 20 años.