Empleo

Ana Carlota Amigo expresa la voluntad de la Junta de seguir apoyando al Serla

No obstante, la consejera de Empleo e Industria recuerda que está pendiente de las conclusiones de la Comisión paritaria PP-Cs

La consejera de Empleo e Industria, Ana Carlota Amigo, junto al nuevo director del Serla, Julio Cordero
La consejera de Empleo e Industria, Ana Carlota Amigo, junto al nuevo director del Serla, Julio CorderoJcyl

La consejera de Empleo e Industria, Ana Carlota Amigo ha manifestado la “voluntad” de la Junta de Castilla y León de mantener el apoyo a la Fundación Serla, para que las organizaciones sindicales y la patronal sigan desarrollando, en su seno las labores de mediación y arbitraje que le son propias.

No obstante, la consejera ha recordado que esta Fundación es una de las entidades del sector público que está pendiente de las conclusiones de la Comisión Paritaria (PP y Cs), constituida para analizar la posible duplicidad de funciones, la necesidad y la viabilidad de un total de 16 entes públicos dependientes de la Junta.

Unas declaraciones que ha realizado con motivo de la visita al nuevo director del Serla, Julio Cordero, con quien ha analizado la actividad que lleva a cabo el Servicio de Relaciones Laborales. Un encuentro donde ha estado acompañada por el viceconsejero de Empleo y Diálogo Social, David Martín, y por el director general de Trabajo y Prevención de Riesgos laborales, José Antonio Bartolomé, ambos vocales de la Fundación.

Julio Cordero es experto en prevención de riesgos laborales, derecho al trabajo y derechos sindicales. Durante los últimos años ha sido profesor de Derecho de Trabajo y de la Seguridad Social en la Universidad de Salamanca, donde dirige la Cátedra de Prevención de Riesgos Laborales. Su nombramiento tuvo lugar el pasado 10 de octubre.

La Junta forma parte del Patronato desde su constitución en el año 1997, ofreciendo así respaldo económico e institucional para que empresas y trabajadores puedan resolver sus conflictos laborales de una forma más rápida y económica, evitando que tengan que acudir a la vía judicial, que dilata la resolución del conflicto y genera un mayor desgaste en las relaciones laborales.