Castilla y León “vende” en Madrid los yacimientos paleolíticos de Siega Verde y Côa

El Museo Arqueológico Nacional (MAN) de Madrid acoge desde hoy la exposición temporal ‘Arte sin límites: Côa y Siega Verde’, que difunde y promueve el arte paleolítico a través de los yacimientos del valle del Côa, situados en la localidad portuguesa de Vila Nova de Foz Côa, y en los de Siega Verde, en la salmantina de Villar de la Yegua, considerados ambos como una revolución en la concepción del arte paleolítico.

De hecho, en ambos se ha llegado a testimoniar de una manera única la producción durante el Paleolítico Superior (hace entre 30.000 y 12.000 años) de manifestaciones artísticas al aire libre.

El vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, ha inaugurado esta muestra que no dejará indiferente al visitante, puesto que en ella podrá encontrar piezas originales, así como réplicas de los yacimientos al aire libre del Paleolítico Superior de mayor antigüedad en todo el mundo.

Considerados estos yacimientos como uno de los grandes descubrimientos arqueológicos del último cuarto del siglo pasado, la exposición pretende dar a conocer estos espacios únicos, capaces de acercar al espectador a una de las formas de expresión artística más antiguas de la Humanidad, combatiendo la idea de que estas imágenes se producían únicamente en el interior de cuevas y abrigos.

Durante el recorrido, organizado en siete ámbitos temáticos, no solo se da a conocer este arte paleolítico al aire libre, sino que sobre todo se ofrece una visión de los grupos humanos que lo llevaron a cabo, sus formas de vida y el contexto en el que se desarrollaron. Se pretende así también combatir la todavía extendida idea de que estas expresiones artísticas –las más antiguas de la humanidad– se produjeron solo en el interior de cuevas y abrigos.

El número dos de Mañueco destacaba el “espíritu de colaboración” que existe entre la República de Portugal y el Reino de España, y ponía en valor también el “excepcional trabajo” desarrollado por todos los investigadores que han trabajado en los yacimientos, tanto a nivel arqueológico como a nivel humano.

“El resultado es lo que hoy podemos visitar aquí, que es una exposición abierta a todo el mundo que esperamos que tenga un enorme éxito gracias a la cooperación entre todas las instituciones que se han involucrado en esta tarea”, apuntaba el dirigente de Vox, mientras recordaba que esta exposición es fruto también del proyecto Paleoarte, que tiene como marco el programa Interreg España-Portugal del Fondo Europeo de Desarrollo Regional.

Al hilo de estos, el vicepresidente felicitaba al país vecino, así como al director del Museo Arqueológico Nacional, Andrés Carretero, por todo el apoyo y esfuerzo realizado, aunque lanzab un dardo al Ministerio de Cultura que dirige Miquel Iceta.

“Hemos echado en falta una mayor cooperación o un mayor respeto institucional por parte del ministro”, decía García-Gallardo, que reprochaba al Ministerio no haber podido dar una rueda de prensa “en condiciones y como sería propio”, y más teniendo en cuenta que es la Junta de Castilla y León la que ha financiado el grueso de esta exposición que han querido acercar a la capital del Reino.

Pese a ello, confiaba en que la muestra sea un lugar de encuentro y una fuente de cultura y de riqueza para los españoles y visitantes.

Siega Verde

El yacimiento de Siega Verde agrupa más de 600 grabados del Paleolítico Superior y se constituye así como la muestra más importante de las primeras manifestaciones al aire libre de la creación artística humana en Europa Occidental, como contrapunto a la idea de que estos grabados únicamente se habían realizado en cuevas.

Declarado Bien de Interés Cultural en 1998, Siega Verde se localiza en el extremo occidental de la provincia de Salamanca, en los términos municipales de Castillejo de Martín Viejo, Villar de Argañán y Villar de la Yegua.

Los grabados se localizan en el margen izquierdo del río Águeda, afluente por la margen izquierda del Duero, y fueron descubiertos a finales de los años ochenta. En opinión de los expertos, este conjunto de representaciones rupestres ha llegado íntegro hasta nuestros días gracias a su tardío conocimiento y difícil visibilidad.

Las manifestaciones artísticas de Siega Verde, fechadas entre los años 22.000 y 11.000 a.C., constituyen una muestra excepcional de los primeros ejemplos de creación simbólica y el inicio del desarrollo cultural de la Humanidad, complementando los valores reconocidos en el conjunto del Côa.

La principal función de los grabados fue la de marcar este territorio mostrándose en lugares visibles y de paso, bien como referente de otros grupos, para asegurar el paso de rebaños y manadas o para propiciar su captura.

Se han identificado 443 representaciones de fauna, donde predominan los cérvidos, bóvidos y caballos, además de otras especies hoy extinguidas y propias de climas glaciares, como renos, bisontes o rinocerontes lanudos, aunque también hay 165 figuras esquemáticas, tres antropomorfos y 35 indeterminadas.

Para llevar a cabo estos grabados se emplearon dos técnicas: el piqueteado, que delimita a base de puntos el contorno de la figura; y la incisión a través de una fina línea grabada, sistema predominante en las figuras de menor tamaño

Tras su paso por Lisboa entre los meses de junio a octubre, ‘Arte sin límites: Côa y Siega Verde’ llega al MAN, donde podrá visitarse desde el 15 de noviembre hasta el 12 de febrero de 2023.

La estancia, además, podrá complementarse con visitas guiadas gratuitas y un ciclo de conferencias en el que participarán diversos especialistas. La exposición contará con un catálogo que podrá adquirirse en la tienda del museo.