Entusiasmo, fuerza y gestión sanitaria para reducir las listas de espera

El Complejo Asistencial Universitario de Salamanca, conocido como CAUSA, cuenta desde hoy con una nueva gerente, la doctora especialista en Medicina Familiar y Comunitaria, Carmen Rodríguez Pajares, que sustituye en el cargo a Luis Ángel González, destituido del mismo la semana pasada.

Su objetivo: reducir las listas de espera, mantener o mejorar la excelencia en los servicios que ofrece el centro sanitario salmantino y seguir siendo un hospital de referencia en la Comunidad y en España.

Esta Licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad de Santiago de Compostela, burgalesa de nacimiento, accede al cargo tras una amplia trayectoria profesional que le ha llevado, entre otros, por la dirección médica en el Hospital de Burgos y gerente de Atención Primaria y Hospitalaria en el área de Campo de Gibraltar. Y lo hace agradecida por la confianza que el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, ha depositado en ella, pero también y sobre todo entusiasmada, con ilusiones renovadas y mucha fuerza, para conseguir situar al CAUSA "donde se merece", decía.

Respecto a la reducción de las listas de espera, Rodríguez Pajares avanzaba que lo primero que va a hacer es analizar la situación antes de tomar una decisión, pero que lo tiene claro es que este problema se reduce con gestión sanitaria, trabajando codo con codo con los equipos y viendo las posibilidades de mejora existentes, sin olvidar poner en valor las enormes fortalezas que hay.

El consejero, por su parte, reconocía que es una prioridad de la Junta para todos los hospitales y en toda la Comunidad, y ponía en valor la capacidad de trabajo de la nueva gerente del Complejo salmantino. “Creemos que la accesibilidad de nuestros pacientes al sistema sanitario es muy importante y por lo tanto es un primer empeño y es un reto de todo el gobierno de la Junta”, apuntaba.

Además, se mostraba convencido de que logrará llevar al CAUSA a ser uno de los grandes hospitales de España pero también del mundo, además de seguir liderando la investigación, la docencia y la innovación sanitaria en Castilla y León.

"Tiene por delante una ardua y dura tarea", decía Vázquez de Rodríguez Pajares, si bien aseguraba que para ello dispone de un equipo de profesionales sanitarios de primer nivel con los que podrá trabajar.

Polémica MIR

Por otro lado, y preguntado por los periodistas tras la presentación de la nueva gerente del CAUSA, el consejero daba su opinión acerca de la polémica pregunta 84 del examen MIR 2024 del pasado domingo, en la que se exponía el caso de un médico de Familia que acumulaba retrasos en su consulta, y en sus respuestas se planteaba que podría tener algún trastorno de la personalidad al dedicarse de lleno a su trabajo

"No tengo calificativos para calificarla, creo que está absolutamente fuera de lugar, y que es absolutamente mala para nuestros profesionales", señalaba Vázquez, para quien esta pregunta se podía haber hecho de muchas otras maneras si realmente quieren conocer cuáles son las patologías de salud mental a las que se refiere.

Además, advertía de que es una pregunta "muy lesiva" para los profesionales de Atención Primaria, en un momento en que están pasando dificultades. El consejero se mostraba convencido de que se impugnará, si bien daba un toque de atención al Gobierno, al asegurar que hubiera esperado del Ministerio que no se hubiera admitido nunca dicha pregunta en el examen.

La cuestión exponía el caso de un facultativo de 50 años que "con frecuencia acumula retraso de dos horas en la consulta, creando algún conflicto, aunque es el que menor cupo tiene de pacientes", y eso que "empieza su jornada laboral antes de la hora para planificar y adelantar su trabajo, pero siempre es el último en salir".

Según el cuestionario, el propio médico justificaba su tardanza en que es "muy perfeccionista", argumentando que entre visitas y burocracia, apenas tiene tiempo para nada, ni siquiera "para ir al gimnasio" o la "vida social".

Los aspirantes debían responder si este exceso de perfeccionismo es síntoma de algún trastorno de personalidad como esquizofrenia, trastorno esquizoide, obsesivo compulsivo (TOC) u otro de personalidad no especificado.

De acuerdo con las respuestas provisionales, el diagnóstico de este trabajador debía ser un "trastorno obsesivo-compulsivo de la personalidad", un problema caracterizado por pensamientos, impulsos o imágenes recurrentes no deseados y/o por conductas o actos mentales repetitivos que los afectados se sienten impulsados a hacer para mitigar la ansiedad que les provocan esas obsesiones