Martínez asegura que Castilla y León "está en vía muerta" por el "conformismo" de Mañueco

El secretario general electo del PSOE de Castilla y León, Carlos Martínez, apura sus últimos días como tal antes de ser entronizado como mandamás dela nave socialista de la comunidad durante el XV Congreso Autonómico que se celebrará este próximo fin de semana en Palencia, como reconocimiento a la alcaldesa de la ciudad, Miriam Andrés, el haber recuperado el bastón de mando de esta ciudad.

Martínez se ha reunido esta tarde con militantes y simpatizantes del partido del puño y la rosa de Valladolid, acompañado de su líder y ministro, Óscar Puente, que se ha quedado todo el día en la capital del Pisuerga tras presentar esta mañana el proyecto de nueva estación de trenes de Valladolid.

Puente ha sido uno de los valedores del también alcalde de Soria como sustituto de Tudanca al frente del PSOE autonómico por delante del propio burgalés cuando parecía que podía presentarse a las primarias así como por encima del también alcalde de León, José Antonio Díez, del que también se habló que podía haber dado el paso para liderar al PSOECyL.

Martínez se ha referido al cónclave de este fin de seman, en el que estarán Pedro Sánchez y Rodríguez Zapatero, como el de "la unidad y el cambio” y aseguraba que sigue trabajando para armar un equipo sólido y lo más horizontal posible de representación de las provincias, para ofrecer un cambio a la ciudadanía y que sea una alternativa al PP en las próximas elecciones autonómicas previstas en febrero o marzo de 2026 si Mañueco no las adelanta antes.

"Al señor Mañueco le hemos cambiado el paso, esperaba un congreso de confrontación y será un congreso de unidad y de cambio, se siente desubicado y tira de manual”, decía el líder socialista, quien afeaba al presidente que no haya respondido cuando le ha tendido la mano para la aprobación de los presupuestos. “Sofa, sofa y más sofa”, apuntaba.

Martínez aseguraba que Mañueco confunde "estabilidad con comodidad” y volvía a pedirle que "se levante del sofa” y trabaje en un proyecto de comunidad frente a la despoblación, la ordenación del territorio o la cercanía a los servicios públicos.

El dirigente del PSOE apelaba a la necesidad de corregir los desequilibrios entre las provincias que no ha conseguido el Partido Popular en sus más de tres décadas de gobierno, pero no desde “la inacción ni el conformismo”. “Seremos los más ricos del cementerio, pero estamos en vía muerta”, decía en relación a una serie de indicadores de los que presume el Gobierno de Fernández Mañueco.

No obstante, rechazaba “distraerse” con una posible convocatoria electoral en la comunidad porque será “cuando le dejen en Madrid o cuando mejor le parezca”, pero incidía en la falta de un proyecto de comunidad y en el “abandono a su suerte” a territorios de Castilla y León, donde él insiste en aplicar políticas para propiciar el derecho a quedarse, uno de los mensajes fuerza de la Ponencia Marco que se debatirá y aprobará en este XV congreso autonómico.