Cultura

Banksy sin Banksy

Una exposición recrea las obras del famoso grafitero con una propuesta inmersiva en el Espai Trafalgar de Barcelona, pese a no contar con la colaboración de su autor original

Reconstruyen la obra de Banksy en una exposición con un centenar de réplicas en Barcelona
Reconstruyen la obra de Banksy en una exposición con un centenar de réplicas en BarcelonaEUROPA PRESS24/02/2020larazonEUROPA PRESS

No sabemos quién es, pero sí sabemos que es uno de los artistas más buscados y cotizados. Es ese creador sin rostro que todos quieren, cuyos originales son arrancados de las paredes para convertir en la gran sorpresa de la próxima subasta de Christie’s o de Sotheby’s. Banksy es hoy en día un fenómenos de masas que ha convertido el grafiti en un arte seguido por millones de personas en todo el mundo, ansiosos de seguir la estela de un creador al margen de las modas y siempre con una voz crítica ante cualquier injusticia.

La creatividad de Banksy coincide también en el tiempo con una nueva moda como es la de la «experiencia». Esto es prescindir de las obras originales del autor para llevar al espectador por un camino de reproducciones y filmaciones, una inmersión en todo este trabajo y que desemboca en muchas ocasiones en fotografías con las que podemos presumir en redes sociales.

Algo de todo eso hay en una exposición que desde ayer puede visitarse en el Espai Trafalgar de Barcelona. «The World of Banksy. The Immersive Experience». En ella se presentan un centenar de obras de Banksy, pero no originales sino reproducciones a tamaño real de grafitis de este creador entre los años 2000 y 2018, y que han ocupado muros, a veces con resultado efímero, en Francia, Estados Unidos, Gran Bretaña, Israel y Palestina. Es una antológica en la que no ha intervenido la mano de su autor original sino la de un grupo de artistas que prefiere permanecer en el anonimato. Llega a la capital catalana después de estrenarse en el Espace Lafayette Drouot de Paríos donde atrapó a unos 150.000 visitantes.

El responsable de esta iniciativa es el productor y director teatral Hazis Varda, propietario del teatro La Palace de la capital francesa . En conversación con este diario, Hazis explicó que lo que se puede ver en Barcelona «es lo mismo que ya estuvo en París y donde hemos querido hacer algo diferente a lo que es habitual cuando hablamops de una exposición. Hemos tratado de recuperar el espíritu callejero de Banksy porque lo más frecuente es mostrar su obra como si fueran cuadros. Eso sería como hacer una paella sin arroz. Así que había que transgredir las normas, igual que lo que hace él».

Pero para ello, según los responsables de la muestra, no hace falta contar con el mismísimo Banksy porque «nadie sabe quién es. Lo que sí sabemos es que está en contra de los derechos de autor, del copyright. Además el apoya que se difundan sus ideas». Así que para hacer la exposición lo único necesario es el equipo anónimo formado por artitsas callejeros que se ha preocupado de hacer las reproducciones facsimilares de iconos del arte del siglo XXI como «Lanzador de flores», «Siempre hay esperanza» –también llamada «Niña con globo»–, «No Ball Games» o «La rata fuera de su cama». Todo ello va acompañado de juegos de luces y sonidos que intentan demostrar que todo esto nació en la calle.

La exposición incluso recrea el Hotel Walled Off, , situado frente al muro de Belén, y que decoró junto a otros artistas y diseñadores internacionales. Se reconoce el toque del maestro del arte urbano y su sentido del humor. El israelí (el soldado) y el palestino (el manifestante) no podían pelearse de otro modo en una habitación de hotel.

«Hemos respetado los formatos que él ha usado en obras que en la mayoría de casos ya no existe y solamente pueden verse en internet», dijo Hazis. Entre lo desaparecido y recreado en el Espai Trafalgar nos encontramos con «50 Aniversario de la revolución de 1968 de París. El nacimiento del arte moderno con plantillas». Pintado por Banksy en 2018 cerca del Centro Pompidou, fue robado la noche del 2 de septiembre de 2019 aunque poco después de su aparición, el 25 de junio de 2018, el museo parisino instalara una placa de plexiglás como medida de seguridad que luego se descubrió fallida. Esta composición estaba en el dorso de un panel de entrada a un aparcamiento y puede leerse como un doble guiño. Por un lado nos encontramos con una evidente referencia a la revolución de mayo del 68 y, por el otro, a una alusión al lugar de nacimiento del arte con estarcido en París.

Para el responsable de la exposición, con Banksy se abren posibilidades de hacer nuevas lecturas del mundo del arte porque «las exposiciones van a revolucionarse. Esto que hacemos aquí es un carburante para la difusión de su mensaje, un mensaje que realmente es muy potente».

Pero el grafitero más famoso del mundo no será el único gran nombre que visite el Espai Trafalgar. Hazis Varda reconoció que trabaja en la posibilidad de hacer algo parecido con Vincent Van Gogh y su mítica circunstancia, aunque por ahora es un proyecto que piensa plasmar hasta dentro de un año y medio.

Mientras Van Gogh va tomando forma, Banksy es el rey en esta sala expositiva que puede visitarse por doce euros. Llama poderosamente la atención que la muestra concluya con una tienda en la que hay de todo; carteles, imanes, libros o libretas con el imaginario del grafitero como eje. Sí, Banksy está libre de derechos y, por tanto, parece que se puede incluso comercializar sus propuestas. De todas formas, es el visitante del Espai Trafalgar el que debe tener la posibilidad de juzgar este Banksy sin Banksy, esta «recreación» de su mundo.