El rechazo a la independencia se vuelve a imponer (47,7%) y aventaja ya en más de tres puntos (44,5%) a los partidarios de la ruptura. En vísperas de las elecciones del 14 de febrero, el sondeo oficial se la Generalitat constata la tendencia del último año y medio: desde julio de 2019, se impone el “no” al “sí” ante la pregunta binaria sobre la secesión.

De hecho, los partidarios de la independencia de Cataluña caen respecto a la encuesta reciente de diciembre, hace apenas un mes, cuando alcanzaban el 45,1%, medio punto más que ahora. El apoyo a la secesión, que nunca ha llegado al 50%, logró su máximo en marzo de 2019 con un 48,4%.

El CEO mantiene así la victoria del “no” a la independencia de los últimos barómetros, pero con una leve reducción de la distancia con respecto al “sí” ya que en diciembre los contrarios a la independencia eran el 49,9%.

La encuesta publicada este viernes se ha elaborado con 1.100 personas entrevistadas telefónicamente entre el 13 y el 21 de enero -durante el repunte de contagios de coronavirus y en pleno debate sobre posponer o no las elecciones del 14 de febrero- y cuenta con un margen de error de 2,95.