Cataluña

Alejandro Fernández (PP) insta a Aragonès a acoger a “okupas” en su casa

El dirigente popular carga contra el president porque Cataluña lidera el ránking de ocupaciones ilegales en España

El líder del PP en Cataluña, Alejandro Fernández.
El líder del PP en Cataluña, Alejandro Fernández.Alberto EstévezAgencia EFE

Alejandro Fernández ha convertido la lucha contra la “okupación” en una de las banderas del PP catalán y en Cataluña hay mucho terreno que recorrer en este aspecto. El líder de los populares catalanes ha radiografiado la situación con dos datos: la autonomía lidera el ránking de “okupaciones” ilegales de toda España concentrando el 48% del total y en 2020 se ha incrementado en un 70%. Y, ante la pasividad de la Generalitat para corregir esta problemática, Fernández le ha espetado a Aragonès en el pleno del Parlament: “Si tan solidarios son ustedes con los ocupas, acojan a uno en su propia casa, pero no obliguen a los demás a hacerlo”.

Fernández ha afirmado que Aragonès no podrá corregir esta circunstancia “ni culpando a Madrid ni atacando al PP”, sino “cambiando diametralmente de política”. A su juicio, el incremento de ocupaciones ilegales en 2020 demuestra que las medidas aprobadas hasta ahora en Cataluña “no han funcionado” y “han empeorado severamente la situación”. En este sentido, ha pedido que se aplique la receta en materia de vivienda de “las democracias de nuestro entorno” y la sentencia 16/2021 del Tribunal Constitucional, que pasa por que sean los poderes públicos quienes garanticen el derecho a la vivienda.

“Pero debe ser compatible con el derecho a la propiedad privada que recoge el artículo 33 de nuestra Constitución”, ha advertido. “En cambio, ustedes lo que han hecho y lo que continúan haciendo es desentenderse de su responsabilidad. No han sacado apenas parque de vivienda pública. Y trasladarles a los propietarios privados dicha responsabilidad a través de su propia vivienda. Y es evidente que esa política no funciona”, ha añadido.

Aragonès ha pedido “más rigor” a la hora de abordar debates importantes como el de la vivienda: por un lado, ha dicho que, a pesar de que la Constitución no recoja el derecho a la vivienda como “fundamental”, el nuevo Govern sí lo tratará como tal; por otro lado, ha pedido que el PP cambie y deje de recurrir continuamente medidas en materia habitacional, como la Ley del alquiler.

El president ha explicado que las políticas habitacionales del Govern pasan por “intervenir en el mercado” porque es lo que, a su juicio, se tiene que hacer cuando hay “fallos en el mercado”. “Y hemos intervenido allí donde había un incremento desmesurado de precios”, ha añadido. A su parecer, la Ley que regula los precios del alquiler ha tenido “efectos positivos” ya que, en los municipios donde el mercado estaba más tensionado, la limitación ha permitido que “baje más el precio medio del alquiler” y también ha habido un “incremento más alto de los contratos de alquiler firmados”.

Cortes en la Meridiana

Asimismo, la diputada popular, Eva Parera, ha preguntado al nuevo conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, por los cortes en la avenida Meridiana, una arteria principal de entrada y salida de Barcelona, que lleva muchos meses sufriendo cortes por protestas de independentistas que concentran en muchas ocasiones menos de medio centenar de personas y que exaspera a muchos barceloneses.

De hecho, la diputada popular ha criticado que los independentistas acumulan ya 450 noches cortando la calle y ha recordado que el TC dejó “muy claro” que el derecho a la manifestación “no es un derecho absoluto ni un derecho ilimitado” y, en esta situación, se está ante un “claro abuso de este derecho”.

Elena ha respondido que “esto va de derechos fundamentales” y, como gobernantes, tienen la “obligación de garantizar los derechos fundamentales de las manifestaciones independentistas, antiindependentistas, contra los indultos o de taxistas”. El conseller ha explicado que si el ejercicio de estos derechos tienen consecuencias hacia terceros, no se trata con “mano dura” sino con “diálogo” y ha afeado a Parera que tenga un criterio u otro en función de quiénes son los manifestantes.