El Banc de Sang lanza una campaña de donación para reducir el déficit de plasma

Si bien es cierto que en los últimos años ha aumentando de forma significativa la sensibilización de la población acerca de la importancia de las donaciones, lo que se ha traducido en un incremento importante en el número de donantes de sangre, por ejemplo, a día de hoy sigue existiendo un importante déficit de plasma a nivel global y ello es debido, por un lado, a las insuficientes donaciones que se realizan y, por el otro, al incremento de la demanda.

Al respecto, es importante aclarar que “el plasma es la parte líquida de la sangre y lleva disueltas proteínas que tienen mucha importancia para la vida de las personas, especialmente las inmunoglobulinas, que son nuestras defensas”, explica Enric Contreras, director de servicios hospitalarios del Banc de Sang i Teixits, quien al respecto añade que “en el plasma también hay disueltas otras proteínas que son factores de coagulación”.

Así pues, cuando una persona hace una donación de sangre, de ésta “se extrae el plasma que, posteriormente, puede ser administrado por vía intravenosa y del que se benefician personas con hemorragias importantes o con anomalías de coagulación”, relata Contreras para a continuación indicar que “ese plasma también se puede someter a un proceso de fraccionamiento para obtener medicamentos, que solo se pueden conseguir a partir del plasma, concretamente de sus inmunoglobulinas, y de los cuales se pueden beneficiar las personas con enfermedades autoinmunes o aquéllas con inmunodeficiencias y que, por lo tanto, no tienen capacidad para fabricar sus propias defensas, por lo que necesitan que se aporten desde fuera”.

Sin embargo, con las donaciones de sangre solo se logran cubrir las necesidades de transfusión directa, pero no aquellas en las que el plasma es fraccionado para obtener medicamentos, de manera que es necesario también llevar a cabo plasmaféresis. “Se trata de la donación exclusiva de plasma, para la que es necesario conectar al donante a una máquina, concretamente un separador celular, que se queda con el plasma y retorna a dicho donante el resto de células de la sangre”, comenta Contreras, quien al respecto indica que este proceso puede durar unos 45 minutos. En cualquier caso, a día de hoy, “solo se cubre el 45% de las necesidades de inmunoglobulinas, por lo que el resto se importa desde Estados Unidos, a través de la compra de medicamentos elaborados a partir de las proteínas de este plasma”, alerta el director de servicios hospitalarios del Banc de Sang i Teixits para a continuación advertir que “somos deficitarios”.

Si bien este es un problema generalizado, que afecta a toda Europa desde hace mucho tiempo, el objetivo es conseguir algún día el autoabastecimiento, de manera que hace ya 5 años se puso en marcha el programa de plasmaféresis para promover las donaciones. Éste está dando ya sus resultados, puesto que si en 2020 se llevaron a cabo en Cataluña 20 mil donaciones de plasma, se prevé acabar este 2021 con 28 mil y, tal y como pone de relieve Contreras, en los últimos 5 años hemos duplicado el número de donaciones”. Sin embargo, el objetivo de llegar a ser autosuficientes es complicado de alcanzar ya que no solo estamos lejos de las 50 o 60 mil donaciones de plasmaféresis que a día de hoy serían necesarias para ello, sino que, además, la necesidad de estos productos de los que se benefician las personas con enfermedades autoinmunes o con inmunodeficiencias va en aumento conforme pasan los años.

Campaña de donación

Es por ello que, aprovechando la celebración de la Semana Mundial de la Donación de Plasma del 4 al 10 de octubre, el Banc de Sang ha puesto en marcha una campaña destinada a dar a conocer a la población que hay un déficit de plasma y a promover a su donación. “La idea es conseguir que en esta semana se lleven a cabo mil donaciones, lo que supondría duplicar la cifra habitual para este período de tiempo”, destaca Contreras, quien al respecto señala además “que si cada semana consiguiéramos mil donaciones seríamos casi autosuficientes”.

En este sentido, el próximo 8 de octubre se organiza la Primera Maratón de Donación de Plasma en el Ayuntamiento de Barcelona, donde los ciudadanos podrán acudir a donar, pero además se mantienen los puntos de donación habituales en los hospitales catalanes, a los que se suman también las campañas móviles en diferentes puntos de Cataluña. Eso sí, cualquier persona que quiera donar plasma, que debe cumplir los requisitos propios del donante de sangre y, además, su vena ha de tener un calibre mínimo para que el flujo de sangre que emana de su vena sea el adecuado, es imprescindible que pida cita previa a través de la web donarsang.gencat.cat/plasma.

Y es que como recuerda Contreras, la donación de plasma tiene la dificultad añadida respecto a la donación de sangre que “requiere de un separador de células, que no hay tantos”, por lo que es necesario establecer unos horarios de uso de la máquina y solo se puede llevar a cabo en aquellos lugares en los que haya dicha infraestructura. En este sentido, también hay que recordar “el donante de plasma ha de permanecer cerca de tres cuartos de hora conectado a la máquina, mientras que donar sangres es cosa solo de unos minutos”