Cáncer

Investigadores del Clínic-IDIBAPS actualizan las guías para el tratamiento del cáncer de hígado

Éstas incluyen ahora los nuevos tratamientos de inmunoterapia y un apartado de ayuda para la toma de decisiones en la práctica clínica , en función de las características y la evolución del paciente

Los doctores Jordi Bruix y Josep Vidal y la doctora María Reig participaron en la presentación de la actualización de las guías de tratamiento en cáncer de hígado del BCLC
Los doctores Jordi Bruix y Josep Vidal y la doctora María Reig participaron en la presentación de la actualización de las guías de tratamiento en cáncer de hígado del BCLCFrancisco Avia

En el diagnóstico y tratamiento de cualquier enfermedad, es fundamental poder contar con un documento de referencia que establezca las pautas de actuación a partir de la mejor evidencia científica disponible y dé a la comunidad médica un lenguaje común a partir del cual actuar bajo un mismo marco, sobre el que articular la investigación y avances de futuro.

En este sentido, en 1986, el grupo de oncología hepática del Hospital Clínic puso en marcha el grupo Barcelona Clinic Liver Cancer (BCLC), que desde entonces lidera las recomendaciones acerca de la estrategia a seguir para el tratamiento del carcinoma hepatocelular -el tipo más frecuente de cáncer de hígado-, un modelo que es referente en casi todo el mundo. Tras aquellas primeras recomendaciones, el grupo ha seguido trabajando durante estas más de tres décadas para ir actualizando la información de esas guías de práctica clínica, combinando la asistencia y la investigación, tanto clínica como traslacional.

Ahora, la revista Journal of Hepatology ha publicado la última actualización de modelo BCLC, que a partir de la clasificación de los casos en función de la medida del tumor, la función hepática y el estado del paciente, permite predecir el pronóstico y recomendar el mejor tratamiento. “Desde que se creara la primera clasificación en 1991, ésta ha ido evolucionando y mejorando y se han ido incorporando nuevos tratamientos”, señala María Reig, jefa de la Unidad de Oncología Hepática (BCLC) del Clínic-IDIBAPS, investigadora CIBEREHD y primera autora de la revisión, quien además pone de relieve que “una de las novedades más destacadas de esta actualización es la inclusión de los tratamientos de inmunoterapia”.

Pero el poder disponer de un mayor número de tratamientos también hace que el proceso de toma de una decisión terapéutica sea más complejo, razón por la cual “la nueva versión del BCLC incorpora un apartado para la toma de decisiones en la práctica clínica”, apunta Reig, quien al respecto indica que “éste no solo tiene en cuenta la evidencia científica de los tratamientos, sino que también estructura las prioridades de tratamiento según las características o evolución que presenta el paciente, es decir que une la información del TAC con las características del paciente para dar la primera opción de tratamiento e información sobre sus expectativas de vida, y eso da un valor añadido a la guía”

Además, el grupo BCLC trabaja también para mejorar la prevención y los tratamientos en el marco del cáncer de hígado a través de la investigación traslacional. En este sentido, Jordi Bruix, hepatólogo y jefe de grupo de investigación de Oncología Hepática del IDIBAPS, señala que “se está trabajando para mejorar la prevención y buscar nuevos marcadores que permitan detectar la generación de cáncer antes de que se pueda detectar por la imagen”. La investigación está orientada, principalmente, a “mejorar el rendimiento de los tratamientos e intervenciones para mantener la enfermedad cronificada”, destaca Bruix, quien al respecto explica que “quizá, en algunos casos, no podamos eliminar el tumor, pero si la enfermedad no progresa, el paciente demorará su muerte”. “Éste es el objetivo de muchos de los tratamientos que se hacen que, más que ir a conseguir reducir el tumor, lo que buscan es evitar que progrese y así alargar la supervivencia”.

En cualquier caso, Bruix quiere dejar claro que “hay que acabar con la idea de que cáncer de hígado es sinónimo de muerte inminente, porque eso no es así. Puede haber un diagnóstico temprano y hay tratamientos, por lo que no debe asociarse a muerte a corto plazo”, insiste el doctor, quien al respecto recuerda que “si bien la supervivencia media se sitúa en los 12 meses, si el cáncer se diagnostica en fase inicial, algo que puede suceder en la mitad de pacientes, y se interviene, se lleva a cabo un trasplante de órgano o se queda el tumor, la supervivencia es superior al 50% a cinco años”. “Ha habido un avance muy importante en este sentido”, asegura Bruix, quien apunta que “la incidencia media del cáncer de hígado es de 9 o 10 casos por cada 100.000 habitantes al año”, siendo la tercera causa de muerte por cáncer en el mundo y afecta habitualmente a pacientes con enfermedades hepáticas crónicas”.