En 2030

¿Cataluña puede organizar en solitario los Juegos Olímpicos de Invierno?

La Generalitat publica 16 informes inéditos realizados entre 2018 y 2021 en los que se analizan las posibilidades de acoger el evento y su viabilidad

Pistas de esquí de La Molina, en la Cerdanya
Pistas de esquí de La Molina, en la CerdanyaDavid BorratAgencia EFE

Pese a haber cerrado un acuerdo a tres bandas -Cataluña, Aragón, COE-, pese a que el propio Comité Olímpico Español lo oficializó hace ya días y pese a las posibilidades de presentar una candidatura con muchos números de ganar a a Sapporo (Japón) y Salt Lake City (Estados Unidos).

Pese a todo, los Juegos Olímpicos de Invierno siguen envueltos en una fuerte polémica que va camino de eternizarse: este martes, el presidente de Aragón, Javier Lambán, volvió a agitar el fantasma de la ruptura y amenazó con apostar por un proyecto “enteramente” en solitario tras descolgarse del pacto alcanzado.

Coincidiendo con esta nueva polvareda, la Generalitat ha desvelado hoy una ristra de informes -hasta 16 documentos- elaborados entre 2018 y 2021 sobre las posibilidades de Cataluña de organizar y acoger el evento, además de su viabilidad e impacto ambiental. Fuentes del Palau aseguran que no existe ninguna voluntad de presentarse en solitario y remiten la información a los trabajos previos necesarios para evaluar todas las posibilidades y escenarios

De hecho, el Govern publica los documentos por transparencia tras las peticiones de varios grupos parlamentarios. “No es un documento de candidatura”, sino estudios previos para facilitar la toma de decisiones, aseguran fuentes de Presidència. Es decir, entonces aún no se contemplaba un proyecto conjunto con Aragón. La iniciativa partió de cero en verano de 2021 con la carta oficial del president Aragonès al COE para optar a una candidatura de los Pirineos junto a Aragón.

Aún así, la pregunta es obligada: ¿Podría Cataluña acoger los Juegos Olímpicos de Invierno? ¿Está capacitado el territorio? Veamos.

Puntos débiles

Por un lado, los informes muestran la falta de infraestructuras para las pruebas de salto y de circuito de hielo, así como las dificultades para tener el circuito de esquí de fondo en las condiciones requeridas por el Comité Olímpico Internacional (COI). Según el pacto actual, el pirineo aragonés debería acoger el esquí de fondo, el biatlón y el curling (en el palacio de hielo de Jaca). Zaragoza organizaría el patinaje artístico, patinaje de velocidad y short track. La previsión es que Aragón cobijara a 2.100 deportistas y oficiales.

Los estudios informan sobre los posibles espacios para las pruebas, tanto en el Pirineo como en Barcelona, y se encargan documentos económicos que muestran unos gastos previsibles de 1.391 millones de euros y unos ingresos de 1.504 millones. Con la distribución actual, el pirineo catalán acogería el esquí de fondo y el esquí alpino, el snowboard, el freestyle esquí; y el esquí de montaña. En la capital catalana se disputarán las pruebas de hockey hielo (previsiblemente, en el Palau Sant Jordi, porque cumple con los requisitos básicos).

El legado de Barcelona 92

También se estudia una estrategia de comunicación de cara a la ciudadanía, la estrategia para aprovechar “el legado” de los Juegos Olímpicos, estudios de movilidad y para conocer las necesidades de los deportistas. De hecho, la Generalitat ha fijado la consulta ciudadana en las comarcas afectadas el domingo 24 de julio, un día antes de que se cumplan 30 años de la inauguración de los Juegos de Barcelona 92, “los mejores de la Historia”, repiten desde el Palau tras subrayar que se trata de una fecha muy “olímpica”.

¿Villas olímpicas?

Incluyen estudios sobre la posible ubicación de las villas olímpicas en Barcelona -en La Marina del Prat Vermell- y en Puigcerdà (Girona) y Naut Aran y Vielha (Lleida). Sin embargo, se descartan ahora ya que Cataluña tiene la suficiente capacidad hotelera para acoger a todos los deportistas.

Según la Generalitat, el coste de los informes, las asistencias técnicas y otros gastos ascendió a un total de 475.000 euros, financiados al 50% por el Departamento de Presidencia y Ferrocarriles de la Generalitat de Cataluña