En 2030

Cataluña deja caer a Aragón y presentará candidatura en solitario para los JJOO de Invierno

La Generalitat ordena elaborar un proyecto que de momento no cuenta con el aval del COE tras la polémica y la oposición total del Gobierno de Javier Lambán

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, acompañado del vicepresidente, Jordi Puigneró y la consellera de Presidencia, Laura Vilagrà
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, acompañado del vicepresidente, Jordi Puigneró y la consellera de Presidencia, Laura VilagràQuique GarcíaAgencia EFE

La Generalitat presentará candidatura sin Aragón y en solitario para acoger los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030 ante el COE. Cataluña oficializa así la ruptura de las negociaciones con el Gobierno de Javier Lambán tras las duras críticas del socialista por el reparto de las pruebas y busca presionar a la Moncloa para recibir el aval al proyecto.

La consellera de Presidència, Laura Vilagrà, encargará a la directora de la Oficina Técnica del proyecto para los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030, Mònica Bosch, la elaboración de una propuesta de candidatura para presentarla al Comité Olímpico Español (COE) tras el choque con el Gobierno de Aragón. “La Generalitat sigue adelante”, insisten en el Ejecutivo catalán a raíz de la polémica levantada por Lambán tras desmarcarse de forma unilateral del pacto suscrito con la Generalitat y el propio COE.

Un mensaje que el Govern de Pere Aragonès repite con la vista puesta en el COE: su visto bueno es imprescindible para el proyecto ya que es el único organismo que tiene potestad ante el COI para presentar un proyecto final que compita por los JJOO con Sapporo (Japón), Salt Lake City (EEUU) y Vancouver (Canadà).

Sin embargo, el salto en solitario de Cataluña todavía no tiene el apoyo del organismo que preside Alejandro Blanco y el Gobierno de Pedro Sánchez es partidario de intentar hasta el final una propuesta conjunta con Aragón.

Ante este escenario, la Generalitat aprovecha y añade presión recordando las posibilidades de una candidatura catalana: según Vilagrà, el Comité Olímpico Internacional (COI) ha expresado su voluntad de que los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030 se celebren en Europa, por lo que cree que el Gobierno no debería “dejar pasar esta oportunidad”.

“¿Quién dejaría pasar esta oportunidad? ¿En serio dice el Gobierno del Estado que si no hay acuerdo con Aragón esto queda cerrado?”, ha recriminado, y ha vuelto a decir que la candidatura conjunta con Aragón está en un punto de no retorno y cree que hay que plantear como alternativa la propuesta propia de Cataluña.

Desmarque de Lambán

El Govern se refiere al pacto alcanzado entre Cataluña, el COE y Aragón para una hipotética candidatura que el gobierno del socialista Javier Lambán rompió a las pocas horas denunciando una supuesto agravio hacia su comunidad. Un extremo que tanto el COE como la Generalitat han negado de plano hasta el punto de desvelar los entresijos del acuerdo suscrito. En el último reparto se pactó que Aragón tuviera 54 pruebas y algo más de 2.000 deportistas, y Cataluña 42 pruebas y 2600 competidores, acuerdo que Aragón rompió después.

Ahora, desde el Palau de la Generalitat incluso hablan de explorar la vía de una colaboración con Italia o Francia en caso de que se acabara optando a los Juegos Olímpicos en solitario. “Con esta colaboración externa y los activos propios que tenemos en Catalunya nos vemos perfectamente capaces de hacer una candidatura competitiva, potente y con posibilidades de éxito”, ha destacado Vilagrà, mano derecha de Pere Aragonès en la Generalitat.

Sobre si Cataluña podría acoger unos JJOO en solitario, el Govern recuerda ahora la ristra de informes -hasta 16 documentos- elaborados entre 2018 y 2021 sobre las posibilidades de Cataluña de organizar y acoger el evento, además de su viabilidad e impacto ambiental que dio a conocer en abril.

Por un lado, los informes mostraban la falta de infraestructuras para las pruebas de salto y de circuito de hielo, así como las dificultades para tener el circuito de esquí de fondo en las condiciones requeridas por el Comité Olímpico Internacional (COI). Eso sí, los documentos económicos mostraban unos gastos previsibles de 1.391 millones de euros y unos ingresos de 1.504 millones.