11-S

Aragonès vuelve a la manifestación independentista de la Diada "para presionar al Gobierno"

El presidente catalán exige "no solo avanzar hacia la amnistía, sino resolver el conflicto" con un referéndum

El president de la Generalitat, Pere Aragonès, interviene durante una rueda de prensa
El president de la Generalitat, Pere Aragonès, interviene durante una rueda de prensaDavid ZorrakinoEuropa Press

Pere Aragonès ha empezado el curso político con un aviso a Sánchez en plenas negociaciones para la investidura: el lunes que viene, el presidente catalán volverá a la manifestación independentista de la Diada "para presionar al Gobierno" en favor de la amnistía y el referéndum. Una advertencia que ha verbalizado este lunes en una entrevista en TV3.

"Este año está muy enfocada en la presión hacia el Gobierno español con motivo de la investidura, recordando cuál es nuestro objetivo, la independencia, y lo que debemos conseguir: no solo avanzar hacia la amnistía, sino resolver el conflicto", ha reiterado el republicano, quien recula y regresa a la manifestación de la ANC tras ausentarse el año pasado por diferencias con la entidad secesionista. Y esto pasa, según sus palabras, por que "Cataluña pueda votar y decidir su futuro".

Sobre la Diada, este año la ANC planea formar cuatro columnas de manifestantes que arrancarán desde diferentes puntos simbólicos de Barcelona –Ciutat de la Justícia, Escuela Proa, Estación de Sants y sede de Hacienda– y convergerán en la plaza de Espanya el lunes 11 de septiembre por la tarde.

La Diada de 2022 se caracterizó por ser la de la ruptura independentista. La parte de ERC del Govern se ausentó, mientras Junts sí asistió a la concentración que derivó en un auténtico clamor contra la gestión del gabinete de Aragonès.

Entre gritos de "Govern dimisión" de los manifestantes, la presidenta de la entidad, Dolors Feliu, desafió al Ejecutivo: "El 52% del Parlament se define como independentista, por lo tanto las opciones son claras. O independencia o convocad elecciones. ¡Independencia o elecciones!", exclamó la líder de la ANC, quien criticó entonces los "falsos diálogos que no engañan a nadie".

Este año, sin embargo, ERC ha decidido recular y posicionarse junto a Junts en la calle para presionar al Gobierno en plenas negociaciones para la investidura. "El escenario es diferente y hay una oportunidad del conjunto del independentismo de avanzar", ha insistido Aragonès.

Por otro lado, el presidente catalán ha confiado en que la estrategia negociadora de Junts y ERC para la investidura no sólo sea "coincidente", sino "coordinada", y ha dejado claro que una amnistía deberá incluir a Carles Puigdemont, pero no así a Laura Borràs en relación a su condena por adjudicar contratos a dedo.