Altercados

La nueva multa de Colau contra el incivismo en la zona más conflictiva de Barcelona

El Ayuntamiento quiere limitar el horario de los comercios 24 horas y aplicar severas sanciones de hasta 600 euros a los que beban en la calle en el Triángulo Golfo

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau preside la reciente Junta Local de Seguridad de Barcelona con el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena y el responsable de seguridad, Albert Batlle
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau preside la reciente Junta Local de Seguridad de Barcelona con el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena y el responsable de seguridad, Albert BatlleMarta PérezAgencia EFE

El Ayuntamiento de Barcelona planea ahora atajar el problema del incivismo en el llamado Triángulo Golfo de la capital catalana, ubicado en el barrio de Poblenou, con dos medidas extremas: multas de hasta 600 euros por beber en la calle y cerrar los supermercados 24 horas por la noche gran parte de la semana. «Será inminente», aseguran en el gabinete de Ada Colau sobre las sanciones. Un plan al que se ha comprometido el Consistorio en pleno verano, en una zona que acumula décadas de polémicas y después de las severas críticas de los vecinos denunciando la «inacción» de las administraciones competentes.

El Triángulo Golfo se encuentra en el distrito de Sant Martí. Es la zona de las calles Bolívia, Ciutat de Granada, Pujades, Marina y la avenida de la Meridiana –las fronteras van variando, con otras como Pere IV o Badajoz también en el centro de la polémica, dibujando un triángulo en el mapa– donde se acumulan varios locales y discotecas de gran aforo. Por ejemplo, Razzmatazz puede cobijar hasta 2.500 personas.

Sin embargo, el problema que denuncian los vecinos son las fiestas improvisadas en la calle, que se alargan hasta altas horas y se repiten también entre semana, especialmente de miércoles a domingo. Ahora en verano los problemas se repiten prácticamente y, sin ir más lejos, este jueves por la noche ardió un contenedor en una de sus calles.

Al margen de las sanciones de hasta 600 euros que prepara el Consistorio para aquellos que beban en la calle generando graves problemas de conflictividad y ruido, el Ayuntamiento prohibirá que las tiendas ubicadas en la zona puedan abrir las noches de miércoles a domingo, con el objetivo de evitar los botellones y las molestias que generan. En concreto, el horario de cierre, que también se aplicará los festivos y vigilias que caigan en lunes y martes, será desde las 22.00 hasta las 07.00 horas.

Así lo establece un decreto impulsado por el Distrito de Sant Martí que se ha aprobado inicialmente y que entrará en vigor este mes de agosto, una vez transcurra el trámite de exposición pública y de aprobación definitiva, explicó este viernes el Consistorio de Ada Colau.

Esta prohibición afecta a todos los establecimientos comerciales que tienen una oferta orientada esencialmente a productos de compra cotidiana de alimentación, de venta personalizada o en régimen de autoservicio, tanto los que ya están en funcionamiento como los que se abran en un futuro.

«Lo que estaban viviendo los vecinos es un infierno absoluto en sus casas, y nuestro deber y obligación es estar al lado de los vecinos y preservar un bien tan preciado como es su descanso», remarcó el concejal del distrito de Sant Martí, David Escudé, en una atención a los medios recogida por Efe.

Esta prohibición de apertura se suma a otras medidas que está impulsado el Consistorio para erradicar el botellón en esta zona y las molestias que causa, como el refuerzo de la presencia policial y de los trabajos de limpieza.

De septiembre a junio se han interpuesto en la zona del Triángulo Golfo de Barcelona 6.500 denuncias por consumo de alcohol, más de 600 denuncias por orinar en el espacio público y que la policía barcelonesa ha requisado unos 40-45 altavoces. Los vecinos ya se han movilizado a través de varias plataformas.