Independentismo

ERC manda otro aviso a Sánchez: "Nadie puede dar por descontado" los votos para la investidura

La secretaria general Marta Rovira rechaza una repetición electoral y reclama al PSOE que se mueva hacia el referéndum

El presidente de la formación, Oriol Junqueras, y la secretaria general, Marta Rovira, durante su intervención en el acto de ERC en Barcelona con el título "Escribimos el futuro republicano" para presentar las líneas estratégicas del partido.
El presidente de la formación, Oriol Junqueras, y la secretaria general, Marta Rovira, durante su intervención en el acto de ERC en Barcelona con el título "Escribimos el futuro republicano" para presentar las líneas estratégicas del partido.Marta PerezAgencia EFE

Ayer fue Pere Aragonès y hoy ha sido la secretaria general de ERC, Marta Rovira. Los principales cuadros del partido han subido el tono en sus avisos al PSOE y este miércoles la dirigente huida en Ginebra ha advertido a Sánchez de que "no puede dar por descontados" los votos republicanos para la investidura. Un claro mensaje antes de iniciar formalmente las negociaciones y después de haber fijado ya su "objetivo" de votar sobre la independencia de Cataluña en la próxima.

En una entrevista en Catalunya Ràdio, Rovira ha apostado por seguir con la mesa de diálogo para "avanzar" en la resolución del "conflicto" por la vía del referéndum, y también ha reclamado acabar con el déficit fiscal y lograr el traspaso de Cercanías, la hoja de ruta que ya marcó el presidente de la Generalitat en campaña.

Sobre la autodeterminación y la amnistía, las dos grandes exigencias del independentismo, ha abogado por comprobar "en qué condiciones se puede votar, en qué condiciones se tiene que acabar la represión política", y ha calificado a la mesa de diálogo como una de las muchas vías para conseguirlo. "Es la primera vez que conseguimos sentar un gobierno español a asumir que hay un conflicto político", ha subrayado para poner en valor la mesa de diálogo, la apuesta estratégica de ERC en la pasada legislatura.

Rovira ha lanzado una doble advertencia: al PSOE -"nadie puede dar por descontados nuestros votos"- y también a Junts. Sobre los socialistas, la dirigente considera que no es imposible "mover" a Pedro Sánchez hacia planteamientos como el del referéndum.

En este sentido, ha pedido al independentismo no desaprovechar "la oportunidad" que tiene ahora mismo para "avanzar en la resolución del conflicto político" porque ERC ha comprobado por la vía de los hechos que es posible "mover" a Sánchez. "Decía -ha señalado- que eran imposibles los indultos y eliminar la sedición", pero ambas cosas han sido conseguidas, ha puesto en valor la dirigente republicana sacando pecho de las concesiones logradas el año pasado.

Un mensaje velado a los posconvergentes para contrarrestar el mensaje de que los votos de Junts son más valiosos que los de ERC -ambos tienen 7 escaños- para investir a Sánchez. De hecho, en las filas republicanas ha molestado que se diera seguro su apoyo a Sánchez y se pusiera el foco en Carles Puigdemont, una situación que ahora tratan de contrarrestar.

Por ello, Pere Aragonès cerró formalmente el curso político con un serio aviso al líder del PSOE: si quiere la investidura, los votos independentistas son clave y el precio a pagar es "votar sobre la independencia". "Cataluña debe votar su futuro y se tiene que poner fin a la represión. Este es nuestro punto de partida", dijo en la última rueda de prensa antes de las vacaciones.

Precisamente sobre Junts, ERC avisa que una repetición electoral podría tener "consecuencias nefastas" tanto para Cataluña como para el independentismo, a la vista de la pérdida de votos que está sufriendo este último en las últimas elecciones.

Además, Rovira ha instado a los posconvergentes a aparcar "reproches, divisiones estériles, tácticas y partidismos" y a alcanzar "un acuerdo estratégico" que ambas formaciones pueden negociar "con discreción".

Aragonès confirmó este lunes conversaciones con Junts, aunque todavía son muy incipientes y están "muy lejos" de llegar a un acuerdo a día de hoy para oficializar el frente común entre republicanos y posconvergentes.