Más de 500 muertos en accidentes de tren en Cataluña desde 1848

En el atropello mortal de un tren el domingo por la noche en Montmeló fallecieron tres mujeres (dos de ellas tenían 22 años y una 19) y un hombre de 21 años. Los Mossos d’Esquadra y el alcalde de la población, Pere Rodríguez, aseguraron que el lugar el que los jóvenes cruzaron las vías estaba prohibido, y que a menos de cien metros hay un puente para poder realizar la operación sin ningún peligro.

Fue el último y trágico episodio de una serie de graves accidentes ferroviarios ocurridos en Cataluña desde la puesta en marcha de este tipo de transporte, en Mataró y en 1848. Repasemos algunos de los episodios más mortales, que en total suman 547 fallecidos en accidente, 62 de los cuales atropellados por trenes.

El primero ocurrió en 1876, cerca de Tàrrega. El tren correo Barcelona-Zaragoza se cortó y parte de su composición descarrila cayendo por un terraplén. Se producen 14 muertes y 19 heridos graves. Más grave fue aún el suceso ocurrido las estaciones de Las Planes y Sarriá, en la ciudad condal. En 1925, descarriló un tren de viajeros de los Ferrocarriles Catalanes, con el resultado de 24 muertos y más de un centenar de heridos.

Otro descarrilamiento, un año después, del tren correo Barcelona-Valencia entre las estaciones de la Ametlla y la Ampolla causó 21 muertos y 130 heridos. Al inicio de la Guerra Civil, en 1937, un tren chocó contra un vagón entre las estaciones de Freginals y Planes de Montsià (Tarragona). Algunos de los convoyes cayeron por un terraplén, con un resultado de 12 fallecidos. En 1938, en Reus, un choque entre convoyes provocó 19 fallecidos y 168 heridos.

En el mismo año ocurrió uno de los sucesos ferroviarios más graves en Cataluña, aunque apenas existe información acerca del accidente. Parece que se produjo a primera hora de la noche, en Castellbisbal, que llovía fuertemente y que la estación donde se produjo el siniestro se había quedado sin electricidad. Los dos trenes que colisionaron habrían sido un mercancías procedente de Sant Vicenç de Calders y uno de viajeros que desde Barcelona se dirigía a Vilafranca del Penedès, el primero de los cuales iría ocupado por gran cantidad de personas, principalmente soldados. Se habló de hasta 65 fallecidos.

En 1949, en la línea de Zaragoza a Reus, entre las estaciones de Els Guiamets y Móra la Nova (Tarragona), descarriló el expreso Barcelona-Madrid y varios de sus coches cayeron . El suceso se saldó con 31 personas fallecidas y 81 heridas.

En 1960, en Montgat, una brigada de trabajadores de Renfe que se hallaba realizando labores de mantenimiento en las vías fue arrollada por un tren de la línea del litoral que desde Barcelona se dirigía a la estación de Maçanet-Massanes. Nueve miembros de la citada brigada fallecieron y dos más resultaron heridos. Se trató del atropello de un tren más grave ocurrido en Cataluña hasta el 23 de junio de 2013.

Muchos años más tarde del atropello de Montgat, en 1981 y cerca de Lleida, un turismo fue arrollado por un tren muriendo sus cuatro ocupantes.

Siete años más tarde, en un paso a nivel sin barreras situado en Juneda (provincia de Lleida), un tren que unía Zaragoza con Barcelona arrolló un autobús en el cual un grupo de niños de una guardería se dirigían a visitar una granja escuela. Fallecieron 15 personas y hubo una docena de heridos.

En Vila-Seca (Tarragona), un tren de contenedores arrolló a un turismo en un paso a nivel sin barreras. Murieron tres personas y otras más resultó herida grave, y ocurrió en 1997.

Fue en 2012 cuando se produjo el accidente ferroviario de Castelldefels. Un grupo de jóvenes inmigrantes sudamericanos que acababa de descender de un tren de cercanías en la estación de la citada localidad, cruzó las vías en su camino hacia las playas cercanas a la estación, donde se llevaba a cabo la celebración de las hogueras de San Juan, momento en el que fueron arrollados por otro convoy, falleciendo 12 personas y resultando heridas otras 13.

Volviendo al atropello de Montmeló, los siete jóvenes cruzaron las vías de la línea R3 a las 20.18 horas, entre las estaciones de Parets del Vallès y Granollers-Canovelles, por un lugar prohibido. Se dirigían al festival DURO Festival de música que se celebraba en los alrededores del Circuit de Barcelona-Cataluña. Pere Rodríguez, el alcalde de Montmeló, indicó que el grupo había llegado a la localidad en tren y se desplazaba hacia el evento.

«Se organizó un dispositivo con un acceso delimitado y con personal informador, y entendemos que el grupo quiso atajar por un lugar que no está ni señalizado ni iluminado, creemos que no sabían dónde iban, con la mala suerte de que ha llegado el tren y se los ha llevado», explicó Rodríguez.