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Gastronomía

¿Sabrías pedir un café fuera de Cataluña? Los nombres y tamaños en cada región de España

De un “tallat” a un “cortado” o un “manchado”: la odisea de pedir café en España

Pedir un café fuera de Cataluña puede ser un desafío, pero también una oportunidad Cedida

Pedir un café puede parecer una de las acciones más simples del día, pero si sales de Cataluña, la cosa se complica. Lo que en Barcelona conocemos como tallat, en Madrid se llama cortado, y en Andalucía puede convertirse en un manchado. Y eso es solo el principio.

Cada región de España tiene su propio lenguaje cafetero, con diferencias no solo en el nombre, sino también en la cantidad de café, la proporción de leche e incluso el recipiente en el que se sirve.

Si alguna vez has sentido confusión al pedir un café fuera de Cataluña, aquí te explicamos cómo evitar malentendidos y disfrutar de tu café sin sorpresas.

El mismo café, diferentes nombres

La primera gran diferencia al salir de Cataluña es la terminología. Un tallat en Barcelona equivale a un cortado en Madrid, pero en una cafetería más internacional es probable que te sirvan un macchiato. Sin embargo, si viajas al sur, la cosa cambia aún más.

En Andalucía:

  • Un manchado tiene más leche que café, lo contrario de lo que esperarías si vienes de Cataluña.
  • En Málaga, el café se pide según proporciones exactas. Un "mitad" es un café con leche equilibrado, mientras que una "sombra" apenas tiene café.

En Cantabria:

  • Aquí lo más común es pedir un mediano, que es básicamente un café con leche… pero siempre en un vaso de cristal.

En Madrid:

  • Si pides una mediana, te traerán un café con leche en una taza de tamaño medio.
  • El "mitad y mitad" es una mezcla curiosa: la leche se sirve caliente y fría al mismo tiempo.

En el País Vasco:

  • El ebaki es la versión local del cortado, aunque con algunas variaciones en la proporción de café y leche según la zona.

En definitiva, dependiendo de la región en la que estés, puedes acabar con un café más fuerte de lo que esperabas… o con un vaso lleno de leche y un toque de café.

Tamaños y medidas: otra fuente de confusión

Además de los nombres, los tamaños del café también varían. En Cataluña, la estructura es bastante clara: cafè sol (solo), tallat (cortado), cafè amb llet (café con leche). Sin embargo, en otras comunidades pueden ofrecerte diferentes proporciones de café y leche, lo que añade otra capa de dificultad a la experiencia.

Por ejemplo, en Málaga, el café se mide en décimas, y los bares suelen tener carteles con las diferentes opciones: un nubetiene un 10% de café y un 90% de leche, mientras que un sombra tiene un poco más de café, pero sigue siendo muy suave. En el extremo opuesto está el largo, que es casi un espresso doble.

Si estás acostumbrado a pedir un café con leche y no quieres terminar con un café aguado, es recomendable preguntar antes de ordenar.

Adaptarse o disfrutar de la diversidad

Pedir un café fuera de Cataluña puede ser un desafío, pero también una oportunidad para descubrir nuevas formas de disfrutar esta bebida universal. Cada región tiene sus propias costumbres y nombres, y conocerlas puede hacer que tu experiencia sea aún más interesante.

La próxima vez que viajes, atrévete a pedir un café con el nombre local y descubre cómo una simple taza puede revelar tanto sobre la cultura de cada lugar. ¿Te atreves a probar un “mitad” en Málaga o un “ebaki” en el País Vasco?