Vacunas

Una vacuna contra todos los virus hospitalarios

En España, 6 de cada 100 pacientes que ingresan en unhospital salen con una infección que no tenían cuando entraron.

Bacterias ‘Staphylococcus aureus’ escapando de la destrucción por células blancas humanas
Bacterias ‘Staphylococcus aureus’ escapando de la destrucción por células blancas humanaslarazon

Según datos del ECDC (Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades) cada año más de 4 millones depacientes se contagian una infección hospitalaria en la Unión Europea. Esto provoca la muerte de unas 37.000 personas y contribuye, de forma indirecta, con otras 110.000 muertes. En España, seis de cada 100 enfermos que ingresan en un centro hospitalario salen con una infección que no tenían cuando entraron.¿Qué pasaría si una vacuna, administrada a los pacientes justo antes o después de llegar al hospital, pudiera protegerlos contra estas bacterias?

Esa es la premisa detrás de una vacuna experimental desarrollada por un equipo de científicos liderados por Brad Spellberg y patentada por la Universidad del Sur de California. Los autores del estudio, publicado en Science, diseñaron la fórmula para prevenir infecciones graves causadas por patógenos resistentes a los medicamentos. Los resultados muestran que una dosis única, administrada en modelos de ratón, pone a las células inmunitarias en modo "Increíble Hulk", proporcionando una protección rápida contra ocho especies diferentes de bacterias y hongos.

En muchos casos, las infecciones son causadas por las llamadas superbacterias, como MRSA (abreviatura de Staphylococcus aureas resistente a la meticilina) o Acinetobacter baumannii. Las infecciones se propagan a través de superficies o equipos contaminados, como catéteres o ventiladores, o de persona a persona, a menudo a través de manos contaminadas. El riesgo es mayor entre los pacientes de las unidades de cuidados intensivos que pueden sufrir infecciones del sitio quirúrgico, infecciones del torrente sanguíneo, infecciones del tracto urinario y neumonía asociada al ventilador.

Las vacunas típicas suelen hacer que el cuerpo produzca anticuerpos contra un patógeno específico. A pesar de la alta incidencia de infecciones adquiridas en la atención médica, actualmente no existen vacunas aprobadas por la FDA que prevengan las infecciones más graves resistentes a los antibióticos.

"Incluso si existieran tales vacunas, se tendrían que implementar múltiples vacunas simultáneamente para proteger contra toda la gama de microbios resistentes a los antibióticos que causan infecciones adquiridas en la atención médica", explica Brian Luna, profesor de Microbiología Molecular e Inmunología y uno de los autores del estudio.

La vacuna experimental adopta un enfoque completamente diferente a lo conocido hasta la fecha: aprovecha el suministro preexistente del cuerpo de células inmunes devoradoras de patógenos llamadas macrófagos, que engullen y digieren bacterias, hongos y otros organismos perjudiciales. Estos “soldados”, que se encuentran en todos los tejidos, neutralizan rápidamente a los invasores que, de otro modo, podrían multiplicarse rápidamente y abrumar las defensas del cuerpo.

“Es un sistema de alerta temprana. Es como si el Departamento de Seguridad Nacional hubiera emitido una alerta terrorista: mantengan los ojos abiertos y estén atentos a los paquetes sospechosos – señala Spellberg -. Estás alertando a los soldados y a los tanques de tu sistema inmunológico y esta vacuna los activa. Esto es muy diferente a desarrollar nuevos antibióticos. Se trata de utilizar nuestro propio sistema inmunológico para luchar contra diferentes superbacterias, lo cual es un enfoque diferente al de todos los demás".

La vacuna se compone de solo tres ingredientes, dos de los cuales ya se utilizan en vacunas aprobadas por la FDA. Un tercer componente es un pequeño trozo de la superficie de un hongo que se encuentra comúnmente en la piel humana.

Probada en dos laboratorios independientes, la vacuna actúa en 24 horas y dura hasta 28 días. En modelos de laboratorio, la cantidad de células inmunitarias que se alimentan de patógenos en la sangre aumentó drásticamente y mejoró el tiempo de supervivencia de las infecciones invasivas de la sangre y los pulmones. Los primeros datos sugieren que una segunda dosis podría ampliar el período para prevenir la infección.

El siguiente paso es obtener orientación de la FDA sobre los requisitos para completar estudios preclínicos y presentar una Solicitud de Nuevo Medicamento en Investigación (IND) en 2024. El primer ensayo de este tipo se realizaría en voluntarios sanos para encontrar la dosis correcta de vacuna que sea segura y desencadena el mismo tipo de respuesta inmune en las personas que la observada en los ratones.