Bielsa y Soler tensan el acuerdo tras dejar paso a Diana Morant y acatar la voluntad de Ferraz

 Diana Morant será la primera mujer que lidere el PSPV. Esta es la única certeza que hay sobre el proceso de negociación que durante la jornada del martes protagonizaron el secretario general del PSPV en Alicante, Alejandro Soler, el de Valencia, Carlos Fernández Bielsa, la ministra de Ciencia, Diana Morant, y el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán.

Es de sobra sabido que el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, hace ya mucho tiempo que decidió quién debía ser la sucesora de Ximo Puig. Apostó por ella cuando la nombró ministra en el verano de 2021. 

Por aquel entonces, nadie preveía que aquella sería la última legislatura de Puig al frente de la Generalitat valenciana, pero Sánchez ya preparaba el terreno.

Además, Morant no solo era y es una apuesta del secretario general del PSOE, sino que también ha contado siempre con el apoyo de Ximo Puig. Es la candidata del «ximismo».

Sin embargo, esta circunstancia no ha sido suficiente para que Bielsa y Soler siguiesen las indicaciones de Ferraz y renunciasen a presentar sus candidaturas a la secretaría general del partido.

Ambos llevan semanas asegurando que no darían un paso atrás y cumplieron con su amenaza. Tanto es así, que la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, llegó a referirse a ellos como «los señores de la guerra» haciendo el enésimo intento de que ambos aceptaran que no es momento para batallas internas.

Pero no habían pasado ni 24 horas cuando ambos fueron llamados a capítulo con un único fin: armar una candidatura única con Diana Morant al frente. A cambio tendrían un puesto en su ejecutiva. Y en este punto se retomarán esta tarde las negociaciones.

Bielsa tenía programado un acto con militantes a las 20 horas en L’ Eliana. Quedó «aplazado» debido a la reunión que se alargó de manera, al menos para él, imprevista.

Fuentes de la negociación, explicaron que tanto Soler como Bielsa habían aceptado a las seis de la tarde- la reunión comenzó por la mañana- no seguir adelante con su candidatura.

No obstante, estaban exigiendo unas cuotas de poder en el partido inaceptables. Desde la presidencia del partido, todas las vicesecretarías... nada es suficiente para sus aspiraciones.

Con Morant en la secretaría general, la persona clave del partido es el secretario de Organización. Su agenda como ministra, sumado a la falta de control orgánico del PSPV, han convertido este puesto en el objeto de deseo de todo el que quiera dirigir el partido desde dentro y, por tanto, debe ser una persona de la total confianza de la secretaria general.

En este punto se retomarán hoy la conversaciones. Lo que está por ver es si el punto de partido es distinto o al menos, los interlocutores estás dispuestos a rebajar la tensión exhibida durante la tarde del martes.

"Para vencer a las derechas"

Pasadas las diez y media de la noche, se enviaba un comunicado conjunto en el que se confirmaba que Morant sería la única candidata para el congreso extraordinario que se celebrará del 22 al 24 de marzo en Benicàssim. "La finalidad de este acuerdo es generar un proyecto político ilusionante, alineado con el proyecto que representa Pedro Sánchez en España, que sea capaz de combatir a las derechas en el ámbito de la Comunitat Valenciana".

El escrito defiende que se abre una nueva etapa en la que "debe visualizarse un cambio de actores y procesos, basado en un nuevo consenso donde cada militante pueda desarrollarse libre y plenamente".

El acuerdo impulsa un proyecto de partido "plural, abierto a toda la sociedad, en el que todas y todos sean bienvenidos", aseguran, y defienden que es el momento de "relanzar nuevos valores políticos y humanos, como los que se están impulsando desde los municipios gobernados por los socialistas y por el Gobierno de España".

La finalidad última de este acuerdo, sostienen, es modernizar los procesos del PSPV-PSOE, fomentando el diálogo y la participación de la militancia, así como abrir el partido para que sirva "de instrumento útil a la sociedad mayoritaria y de progreso" de la Comunitat Valenciana.

Con todo, Ferraz evitó ayer un proceso de primarias que repitiese lo vivido durante décadas en el PSPV, pero ni mucho menos ha logrado unir un partido dividido en familias mal avenidas.