Ocio

Las "ecoterrazas" sostenibles llegan al barrio de moda de Valencia: avisan cuando se grita más de la cuenta

El mobiliario tiene como objetivo reducir los niveles de ruido

El mobiliario está diseñado para reducir el ruido
El mobiliario está diseñado para reducir el ruidoLa Razón

Restaurantes y bares del barrio valenciano de Russafa han puesto en marcha este martes un proyecto piloto denominado 'ecoterrazas sostenibles', cuyo objetivo es disminuir los niveles de ruido generados por el ocio con mobiliario y materiales sostenibles​ y discos y sombrillas realizadas con materiales fonoabsorbentes.

El Ayuntamiento de València, en el marco de su estrategia de innovación València Innovation Capital​, ha impulsado desde las concejalías de Innovación, Turismo y Mejora Climática este proyecto, que cuenta con la colaboración de la Asociación de Hostelería de Russafa Al Balansí y se desarrollará durante este año.

El proyecto se llevará a cabo en los dos tramos de la calle Cura Femenía, con un modelo de terrazas homogéneo y respetuoso con el medio ambiente que pueda ser posteriormente el modelo oficial al que adaptarse el resto de locales de la ciudad, con criterios de sostenibilidad y resiliencia a las condiciones climáticas y para facilitar el derecho al descanso del vecindario.

La concejala de Innovación y Turismo del Ayuntamiento de València, Paula Llobet, ha afirmado que Russafa es "un laboratorio perfecto para probar esta iniciativa que busca un nuevo modelo de terrazas urbanas, más sostenibles y amables, que además pueden ser extrapolables a otro enclave de la ciudad, o incluso ser modelo para otras urbes".

El edil de Mejora Climática, Carlos Mundina, ha subrayado que el proyecto "es innovador" y permite "testar una solución que está encaminada a que València tenga un espacio urbano respetuoso con el medio ambiente y con las personas", según un comunicado del Consistorio.

El piloto también incluye una campaña de sensibilización dirigida a los clientes de los locales de la calle como al resto de ciudadanía, en la que se informa de la iniciativa y se apela a colaborar en la disminución del ruido y la convivencia con el vecindario.

Además, se han instalado unas lámparas en las mesas de las terrazas que advierten a clientes y propietarios cuando se alcanzan volúmenes más elevados, y se ha digitalizado la información relativa a los permisos y licencias de los locales vía QR, que se ha colocado de manera visible en los locales.

Tras la prueba piloto que terminará a finales de noviembre, se procederá a la recopilación de datos, al análisis y evaluación del proyecto, con la redacción de un informe y publicación de conclusiones.

Por su parte, los hosteleros de Russafa han destacado que las terrazas sostenibles son "el ejemplo de cómo la innovación y el diálogo mejoran la convivencia ciudadana y protegen el turismo", según ha afirmado la presidenta de la Asociación por una Hostelería Responsable en Russafa (Al Balansí) y de la Coordinadora de los Barrios de Valencia, Amor López.

Ha indicado que esperan que esta prueba piloto marque un punto de inflexión en la puesta en marcha de medidas para la sostenibilidad de la actividad turística, haciendo compatible la actividad hostelera con el descanso vecinal y el respeto al entorno .