El misterioso clímax feminista del arte

El año 2020 fue un año devastador para la cultura. La pandemia lo paralizó casi todo y, debido a las restricciones sanitarias, la mayor parte de los museos cerraron o se vieron fuertemente afectados por la caída del turismo. Las pantallas de nuestros ordenadores y «smartphones» se convirtieron en la ventana de urgencia que la mayor parte de la población mundial utilizó para satisfacer su apetito cultural. Google se convirtió en el paraíso de los amantes del arte. Y, a resultas de ello, el tráfico creció y las búsquedas de artistas se multiplicaron. Un estudio acaba de publicar el listado de los artistas más buscados en internet durante 2020, con el interés añadido de que tales búsquedas aparecen segregadas por países. En términos absolutos, la lista con los siete nombres que más interés han despertado en el conjunto del planeta contiene algunas sorpresas: 1) Leonardo da Vinci, vencedor en 82 países; 2) Frida Kahlo, 29 países; 3) Van Gogh (24); 4) Artemisia Gentileschi (23); 5) Picasso (18); 6) Banksy (14); y 7) Diego Velázquez (2).

La presencia de Leonardo en el primer puesto resulta comprensible –no en vano, la «Mona Lisa» es, probablemente, la imagen más icónica de la historia del arte. Tampoco sorprende la aparición de Van Gogh y de Picasso –transformados por la cultura popular en semidivinidades que trascienden el estricto mundo del arte–; ni la de Velázquez o Banksy –el artista contemporáneo más viral y cuyo lenguaje mejor se adapta a la lógica de las redes sociales–. Ahora bien, lo que llama poderosamente la atención es que una autora como Frida Kahlo –cuya pintura posee una descarnada aspereza conceptual– se haya encaramado a la segunda posición y, más todavía, que Artemisia Gentileschi constituya el nombre de artista más buscado en 23 países. Gentileschi es una de las pocas artistas mujeres que adquirió prestigio en la historia del arte. Y, aunque durante mucho tiempo ha sido considerada como una figura de culto, su pintura nunca ha resultado excesivamente popular entre la población no experta en arte. Kahlo y Gentileschi se han convertido, durante las últimas décadas, en figuras clave dentro del imaginario feminista. Y quizás sea ésta la razón por la que, en un contexto como el actual, en el que la reivindicación por los derechos de la mujer se encuentra en el clímax de su influencia social, su obra ha adquirido tan especial significación para tantos usuarios de internet. En España, por ejemplo, Frida Kahlo es la artista más «googleada» de 2020; circunstancia que se repite en la mayoría de los países latinoamericanos. ¿Tanto peso tiene el feminismo en nuestro país como para resultar el factor determinante de esta inesperada popularidad de la pintora mexicana? Probablemente existan otras causas que contribuyan a explicar este fenómeno, pero lo cierto es que, desde el punto de vista sociológico, resultan por ahora un verdadero misterio.