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Cine

Los directores europeos reclaman a Bruselas mantener las protecciones al cine frente a Trump

"Exigimos que el cine y el audiovisual sigan protegidos por leyes que los reconozcan como ámbitos culturales, incluida la excepción cultural", señalaron los realizadores en el manifiesto

Varios directores, ayer en Cannes, tras emitir el manifiesto antiaranceles Nerea GonzálezEFE

Decenas de realizadores europeos emitieron un manifiesto este domingo en Cannes para pedir a la Unión Europea mantener las protecciones al cine, incluidas las reglas de excepción cultural, frente a las presiones del presidente estadounidense, Donald Trump, y sus políticas de guerra comercial.

"Exigimos que el cine y el audiovisual sigan protegidos por leyes que los reconozcan como ámbitos culturales, incluida la excepción cultural", señalaron los realizadores en el manifiesto, que en Cannes fue leído por la española Gala Hernández López y los franceses Jérôme Enrico, Gérard Krawczyk, Marine Francen y Romain Cogitore.

La versión en línea de este manifiesto ha sido también firmada por una decena de organizaciones de cineastas europeos y por figuras como los franceses Claude Lelouch, Agnieszka Holland, Cédric Klapisch o los hermanos Dardenne, la española Isabel Coixet o el portugués Miguel Gomes, entre otros.

"En Europa, desde los hermanos Lumière hasta nuestros días, cada película es un prototipo, una propuesta única que no responde necesariamente a una demanda del mercado. Esto nunca ha impedido algunas empresas comerciales de gran éxito", recuerda el texto.

Más concretamente, los cineastas manifiestan su preocupación al ver que, "en el contexto de la guerra económica con los Estados Unidos", y con Trump reclamando personalmente el fin de las reglas de protección, la Comisión Europea "quiere borrar el carácter cultural del cine", al limitarlo "solo a su escala industrial".

Bruselas, lamentan, ya no llama al sector ni "cine", ni "actor cultural", ni siquiera "industria cultural", sino "industria creativa".

Con esa denominación, el séptimo arte ha sido transferido desde las competencias del comisario de Cultura a las de Asuntos Digitales y Mercado Interno.

"Considerarlo cada vez más como un 'actor de la industria como cualquier otro', sujeto únicamente a las leyes del mercado, beneficiaría inmediatamente a las producciones estadounidenses y sería catastrófico para nuestra profesión y para la diversidad de películas que podríamos ofrecer al público en Europa y en el mundo entero", recalca el manifiesto.

Los cineastas de Europa piden no ser "ingenuos", ya que "la guerra económica librada por EE.UU. es también una guerra cultural".

"El cine europeo ha mantenido plenamente su fuerza a lo largo de las décadas porque, frente a los miles de millones de Hollywood y a su lengua inglesa 'universal', hemos ofrecido, con mucho menos dinero, una increíble diversidad de puntos de vista, una maravillosa y fértil libertad de expresión y un ADN cultural", señalan los firmantes.

"Estos activos -agregan- son la envidia incluso de nuestros amigos cineastas al otro lado de del océano".