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Estreno

¿Quién es «Simón de la montaña»?

Federico Luis dirige esta cinta que tantos interrogantes abre sobre la discapacidad

¿Quién es «Simón de la montaña»?
¿Quién es «Simón de la montaña»?X

Nos preguntamos fundamentalmente si acaso es «Simón de la montaña» un discapacitado, o si es un impostor. También: ¿qué es un discapacitado intelectual?, ¿quién lo es y en base a qué criterios?, ¿dónde está la frontera entre la capacidad y la discapacidad?, ¿quién expide los carnés de discapacidad?, ¿qué relación tiene nuestra sociedad con las personas con deficiencias intelectuales? Y, además, un asunto éticamente espinoso: ¿pueden tener sexo libremente los discapacitados intelectuales?, ¿hay que controlar y limitar sus pulsiones, sus deseos?, ¿basta con instruirlos?...

Todas estos, y más, son interrogantes que abre, sin cerrar, la primera película que dirige en solitario el cineasta argentino Federico Luis. «La cinta es sobre todo una pregunta –asegura el director de «Simón de la montaña»–. Después de un par de proyecciones, en el turno de preguntas y respuestas, me costó mucho que me creyesen que yo no estaba ocultando una verdad, que yo también me hacía esas cuestiones sin conocer las respuestas, que me limito a compartir mis dudas. Y esas preguntas se le trasladan al espectador para que la proyección en su cabeza pueda ser mucho más infinita que la que está en la pantalla».

El joven actor Lorenzo Ferro cambia radicalmente de registro, desde que interpretara al prenda de Carlitos en «El ángel», para dar vida a Simón, un chico que anda perdido y que encuentra su sitio entre un grupo de jóvenes con discapacidad intelectual. Mas el quid de la cuestión es si el protagonista realmente también tiene un déficit intelectual o actúa para poder salir de su rutina, que rechaza, e integrarse en esta nueva vida. «La película trata de hacerse preguntas alrededor de ese abanico de las distintas configuraciones mentales que pueden tener las personas –comenta Federico Luis preguntado por la pertinencia de un actor «funcional» para encarnar al protagonista–. Era interesante, así como gran porcentaje del elenco tiene certificado de discapacidad, que ese personaje que se iba a aproximar a ese mundo fuera un extraño, como el espectador; que el espectador se viese a sí mismo como ese personaje, que empatizara. Y que, desde el punto de vista visual, uno pudiese dudar si es realmente así o está actuando».

«Eso es el cine»

El intérprete, que asegura que se le «desdibujó» la línea entre «lo personal y lo profesional», dice que «es una gran película porque el director no tiene las respuestas y comparte las dudas, las preguntas que tiene. Hay unas ganas de compartir las preguntas que nos hacemos con otros, y las respuestas, encauzadas a través del diálogo, van a ser provisorias. Eso es el cine», remata Lorenzo Ferro.

«De nuevo lo que la película puede hacer es proponer el debate sobre un tema que le cuesta encontrar un lugar para ser debatido», dice su director respecto al tema del sexo entre discapacitados. «Yo tengo mi opinión, pero eso no es interesante –afirma Federico Luis–. Lo importante es que debates como este, en los márgenes de la discusión, encuentren su lugar y lleguen a la sociedad, en este caso a través del cine».