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Entrevista

Joël Dicker: «El principio de la literatura es el de no encajar en ningún sitio»

El autor lanza «La muy catastrófica visita al zoo», una novela con nuevo tono narrativo y para todos los públicos

Entrevista al escritor Joël Dicker
Entrevista al escritor Joël Dicker. David JarDavid JarFotógrafos

Apenas ha pasado un año desde su última visita a Madrid, cuando presentó «Un animal salvaje», y Joël Dicker ya vuelve para hablarnos de un nuevo título. Escribe casi tan rápido como sus voraces y millones de lectores pasan las páginas de sus novelas, pero no por ello deja de sorprender. En «La muy catastrófica visita al zoo» (Alfaguara) ha dado cierto giro narrativo para proponer una trama para todos los públicos. Se mantiene el misterio, con una pizca de humor y una protagonista, Joséphine, que junto a sus amigos se convierte en detective tras la catastrófica visita de su clase del colegio al zoo: nadie sabe qué ha pasado, pero las tragedias nunca llegan solas y las apariencias engañan. Todo ello se presenta en una obra al estilo Dicker: con constantes guiños sobre la democracia, la educación inclusiva o la potencia de la mirada infantil.

¿El apellido «best seller» conlleva una gran responsabilidad?

No proyecto al crear un libro que deba ser un «best seller». Para mí, cada novela es una etapa y veo bien que sean distintas, porque se crea una distancia y me lleva a la idea de que la siguiente tiene que ser la mejor posible. Siempre esperando que sea leída, por supuesto, pero no es el objetivo.

¿Es un riesgo cambiar el tono como ha hecho con este libro?

Sí, pero no hace falta mirarlo así. Yo escribo el libro que quiero hacer. Cuando terminé «La muy catastrófica visita al zoo» fue cuando me di cuenta del cambio, que no es novela negra, que no hay asesinato. Pero, ¿qué es mas riesgo, proponer algo distinto o hacer constantemente el mismo libro?

La narradora es una niña. ¿Cómo es pensar desde la infancia?

Me emocionaba llegar a la voz de Joséphine. Me permitía decir cosas distintas, porque tiene más libertad de palabra que los adultos, y hablar de temas como la democracia o la diversidad sin ser moralizador.

En su equipo de detectives hay un niño karateka, uno hipocondríaco, otro que no habla... ¿son reflejos de nosotros mismos?

La idea era crear un colegio «normal» y otro «especial», al que van nuestros protagonistas. ¿Qué les hace diferentes a los demás, si tienen expectativas iguales a las de la escuela pública de al lado? Esa es la realidad de nuestro mundo. Tenemos la impresión de que somos diferentes, y ahí está la riqueza, pero al final todos anhelamos lo mismo. Todos tenemos inseguridades, queremos ser amados, buscar un trabajo o que nos respeten.

«Narrar desde la voz de una niña me permitía tener más libertad de palabra sin ser moralizador»

Joël Dicker

¿La diversidad se fuerza?

Cada persona puede ser como quiera, y a la vez deberíamos ser capaces de adaptarnos al mundo. Hace falta encontrar un punto en común, y ahí es donde está la libertad, que puede ser distinta para cada uno. La respuesta está en la responsabilidad, que es lo que nos hace funcionar. La capacidad de aceptar que vivimos en un mundo que debe tener normas y reglas, las cuales funcionan por parte de un gobierno democrático, y que por tanto lo hemos elegido nosotros, lo que nos lleva de nuevo a esa responsabilidad.

Entrevista al escritor Joël Dicker. David Jar
Entrevista al escritor Joël Dicker. David JarDavid JarFotógrafos

¿No cree que vamos justo al contrario, hacia una sociedad más individualista?

Tiene razón. Pero en una democracia debemos ser capaces de comprender cuál es nuestro sitio para que el mundo funcione, no pensar todo el tiempo en el yo. Me pregunto cómo hemos llegado hasta aquí, a que solo nos importen nuestras vidas, nuestros jardines o lo que vamos a comer hoy. Es complicado tener un futuro así.

¿Cómo encajan este tipo de reflexiones en una ficción?

Siempre están en mis libros. Propongo ese primer grado de entretenimiento, que es muy importante, ese placer y además el hecho de leer en papel nos construye el cerebro. Una vez logro esa etapa, busco contar algo que haga razonar a los lectores. Cuando terminas un libro hace falta que quede un eco, una temática que se grabe.

Quizá eso escape del perfil de autor de suspense, que se debe íntegramente al entretenimiento, escapando de lo reivindicativo. ¿Qué opina?

Mis novelas son como un caramelo, porque te dan ganas de querer más y más. Tengo mucho respeto por la novela policíaca, pero no es mi estilo, sino que es una herramienta más que utilizar para meter alguna sorpresa.

¿Acabará la literatura siendo como la música, cada vez menos fácil de categorizar?

Entiendo que metamos los libros en cajas, en géneros, por tema de organización. Pero en general no podemos esperar que un libro entre en una caja de pleno. Porque el principio de la literatura es exactamente lo contrario, es no encajar en ningún sitio. Es como la vida, donde hay cosas distintas, experiencias diferentes a las de los demás. Y la vida no cabe en una caja.