Cristiano Ronaldo

Cristiano ofrece su peor versión con las gradas vacías

El rendimiento del portugués ha caído de forma evidente desde que el público no puede asistir a los partidos.

Cristiano Ronaldo se lamenta durante la final de Copa contra el Nápoles. (AP Photo/Andrew Medichini)
Cristiano Ronaldo se lamenta durante la final de Copa contra el Nápoles. (AP Photo/Andrew Medichini)Andrew MedichiniAP

A Cristiano Ronaldo no le ha sentado nada bien que las gradas de los estadios se vacíen de público. El delantero de la Juventus vaga sin rumbo por los partidos, como perdido y desorientado, desde que el público no puede asistir en directo. En los tres encuentros que ha disputado a puerta cerrada, uno de antes del parón y dos desde que se reanudó la competición, su influencia en el juego ha sido casi nula y su capacidad goleadora se ha esfumado. En los dos últimos partidos ha sido un jugador intrascendente. Cristiano juega para sí mismo y para el público. Y sin público, le falta ese espejo en el que verse reflejado.

Si nos apoyamos en las estadísticas, en los números, que siempre han servido para dar brillo a su carrera, la caída en el rendimiento de Cristiano desde que no tiene quien le observe desde la grada es evidente. Pero más allá de las cifras, el portugués no ha transmitido señales positivas. Ya sea como delantero centro o situado en la banda izquierda, apenas ha participado del juego, ha rematado poco y durante muchas fases de los partidos parecía desconectado del resto del equipo.

No obstante, y conociendo la ambición del portugués, puede esperarse que en cualquier momento resurja y sea otra vez ese futbolista que enlazó una espectacular racha de 11 encuentros seguidos marcando en la Serie A. Dieciséis goles, con tres dobletes y un hat-trick, entre el 1 de diciembre de 2019 y el 22 de febrero de 2020. En esas fechas también exhibió su voracidad goleadora con dos tantos más en la Copa de Italia, uno en cuartos de final contra la Roma y otro en la ida de semifinales ante el Milan.

Lo mejor que ha hecho desde entonces es dar una asistencia a Ramsey en la victoria por 2-0 contra el Inter en un Juventus Stadium ya vacío. Fue el último partido que se disputó antes del parón por la pandemia del COVID-19.

El regreso a la competición ha ofrecido una versión desconocida de Cristiano. Contra el Milan, en la vuelta de semifinales de Copa, solo apareció para fallar un penalti. Gianluigi Donnarumma desvió el lanzamiento y el balón acabó golpeando en el poste. Peor fue la puesta en escena en la final ante el Nápoles. Apenas ofreció algún disparo sin potencia ni colocación. Y nada más. Nunca encontró su sitio durante el encuentro y ni siquiera pudo hacer su lanzamiento en la tanda de penaltis que terminó dando el título al Nápoles.

Es la segunda final que pierde esta temporada la Juventus, que ya cayó el pasado 22 de diciembre contra la Lazio por 1-3 en la Supercopa de Italia.