España comienza con seguridad ante Eslovenia (3-0)

España se ha adaptado rápido a la extraña fase final de la Eurocopa sub’21. Jugaba en Eslovenia contra el anfitrión, pero sólo sintió la presión de los locales en los últimos minutos de la primera parte. Hubo dudas en esos momentos y oportunidades para los eslovenos, pero sin público nada es lo que era y la selección dominó antes y después, con la seguridad del que se siente superior.

Le costó llegar al gol, pero cuando encontró el camino liquidó el partido de manera rápida. En dos minutos llegaron los goles de Puado y de Gonzalo Villar que vencieron definitivamente la resistencia de los eslovenos. El centrocampista de la Roma es el nuevo lider de la selección. Con tantos jugadores ausentes por haber ascendido a la absoluta, la selección de Luis de la Fuente agradece la presencia de un jugador que es habitual en uno de los grandes de la Seria A. Villar maneja el equipo, pero la dificultad está en el remate, igual que ha sucedido durante mucho tiempo con la absoluta.

Abel Ruiz, que se ha cansado de marcar goles con las inferiores encontró un muro en el portero esloveno. Tampoco pudo aprovechar el regalo que le hizo el guardameta, que le entregó la pelota en el área pero respondió con agilidad al remate del delantero del Braga.

Una de las mejores armas ofensivas de la selección fueron las llegadas de Miranda por el costado izquierdo. El lateral del Betis se entiende perfectamente con Cucurella, que juega por delante como en el Getafe. El capitán español dio los pases de los dos primeros goles antes de retirarse. De la Fuente no quiere castigar demasiado a los futbolistas más exigidos en la temporada.

Se fue Cucurella, pero se quedó Miranda, que lo intentó con dos poderosos disparos en la primera mitad y encontró el premio en el final del partido después de una pared con Manu García. El centrocampista del Sporting le devolvió la pelota para que llegara al área con ventaja y el remate fue imposible para el portero.

A pesar de las ausencias, España ha conseguido llevar un buen equipo, como demuestra la suplencia de Manu García, un futbolista de talento, con recorrido en el Manchester City por el que el Sporting pagó cuatro millones de euros.

España comienza con fuerza el campeonato y ahora espera a Italia, a la que se enfrenta el sábado. Si gana podría estar clasificada y afrontar con más tranquilidad el último encuentro ante la República Checa.