Tenis

Lo que parece una cosa y es otra en el juego de Nadal

Francis Roig, uno de sus entrenadores, describe en atptour.com la trayectoria de Rafa en esta gira de tierra antes de intentar el asalto a su décimo cuarto Roland Garros

Spain's Rafael Nadal returns the ball to Serbia's Novak Djokovic during their final match at the Italian Open tennis tournament, in Rome, Sunday, May 16, 2021. (AP Photo/Gregorio Borgia)
Spain's Rafael Nadal returns the ball to Serbia's Novak Djokovic during their final match at the Italian Open tennis tournament, in Rome, Sunday, May 16, 2021. (AP Photo/Gregorio Borgia)Gregorio BorgiaAgencia AP

El camino de Rafa Nadal hasta Roland Garros ha terminado. La gira de tierra concluye el 13 de junio con la final del Grand Slam sobre tierra, en la que espera estar el balear para intentar conquistarlo décimo cuarta vez, lo que tendría el premio añadido de ser el “Grande” número 21, con lo que superaría a Roger Federer, con el que está empatado a 20. Francisco Roig, uno de los entrenadores del zurdo, concedió una entrevista a atptour.com en la que analiza estos últimos meses de su pupilo y un dato, al menos curioso: “Si miras las estadísticas, verás que Rafa es un jugador al que tampoco le interesa tanto jugar puntos largos. Si esto ocurre, significa que la calidad de pelota no es tan buena porque no ha desbordado. Es curioso pensar esto, pero la estadística lo refleja así”, dice Roig. “Estos puntos largos se dan cuando Rafa no está pegando con la calidad necesaria, lo que pasa es que tiene la capacidad de jugar una bola más. Pero cuando pega bien, en tres o cuatro tiros es capaz de desbordar, con un buen resto profundo, entrando en pista… De alguna manera, prima más pegarle bien a la pelota y luego ya entra en juego el aspecto táctico. Creo que si bien le interesa un partido largo, porque mentalmente es un jugador que desgasta mucho al pelear cada punto, también entiendo que tiene que intentar desbordar con sus golpes para no jugar puntos demasiado largos”, añadió el entrenador.

En Montecarlo, asegura Roig, Rafa estaba teniendo buenas sensaciones, que le faltaron el día de Rublev en cuartos. “Raro en él, pero esto es un deporte y puede pasar. No son matemáticas”, analizó. En Barcelona ganó y “al final, lo más positivo es que acaba haciendo ante Tsitsipas, que estaba número uno en la Race [FedEx ATP Carrera Turín] y que venía de ganar en Montecarlo”; en Madrid con la altitud siempre en más difícil. Es más, el misma rival que le venció en la capital de España, Zverev, después perdió con Nadal en Roma, que sí sufrió en sus dos primeros partidos, contra Sinner y Shapovalov. “Ya en Roma sigue entrenando bastante bien, con algunos fallos, pero tocando bien la bola. Me gustaba cómo estaba entrenando, sin importar que cometiese algún error, pero pegando bien. Y eso es lo que ocurría, la bola andaba como debía. Luego, en competición hace winners porque construye, se atreve y tiene decisión. Si no estás jugando bien, no tienes oportunidades de atacar, desvela Roig.

A Roland Garros, por tanto, Nadal llega bien, con algún aspecto que pulir. “Es importante un poco más de movilidad. A nivel de capacidad aeróbica ha estado muy bien, aguantando en los partidos, pero creo que tenemos margen de mejora en los desplazamientos. Todavía puede estar un punto más dinámico, tanto hacia delante como en la movilidad lateral. Y también se debe trabajar el saque, aunque ha ido cada vez a mejor. De hecho, contra Djokovic ya estuvo bastante bien”, explica Francis Roig.