El derbi de Champions

En forma
Los teléfonos móviles forman parte de nuestra vida, hasta el punto de que nos resulta incluso extraño conocer a una persona que no tenga o no use un smarphone. Aunque los móviles han demostrado ser herramientas sumamente beneficiosas para nuestras actividades diarias a veces también tienen efectos muy negativos sobre nuestra salud mental y física. Y esto es lo que ha demostrado la Ciencia en varios estudios sobre ejercicio físico y dispositivos electrónicos.
Una investigación publicada en la revista Performance Enhancement & Health afirmó que el uso de dispositivos durante el entrenamiento afecta al equilibrio y la estabilidad un 45% más que en aquellas personas que no prestan atención al móvil durante la actividad física. Se comprobó que hablar por teléfono es un 19% menos nocivo que el envío de mensajes, pero ambas actividades afectaron la capacidad de equilibrio de los deportistas. Esto hace que aumenten los riesgos de caídas, lesiones musculares y esqueléticas.
De hecho, el 2 % de los participantes en el estudio tuvieron que abandonar de la prueba por dolores lumbares o de rodilla, provocados por la desconcentración en la sesión de entrenamiento.
Por otro lado, otro estudio de Computers in Human Behavior comprobó que mandar mensajes de texto durante el entrenamiento provoca una disminución notable de la intensidad del ejercicio.
Aquellos que se vincularon con el dispositivo durante al menos 20 minutos, pasaron casi 10 minutos en la zona de baja intensidad y solo 7 en una zona alta. Por el contrario los que entrenaron sin móvil tuvieron 13 minutos de alta intensidad, lo que lleva a este último grupo a un entrenamiento más efectivo. Pero además, los que usan el móvil tienen un menor gasto calórico durante su entreno por lo que tampoco es recomendable si quieres perder peso.
Michael Rebold, autor principal del estudio, asegura que los resultados confirman los daños que provoca el uso de dispositivos en diversas actividades.
Pero destaca la sorpresa de los datos sobre cómo afectó a la resistencia de los voluntarios. Los estudios se hicieron entre estudiantes universitarios, se podría pensar que al nacer en esta era digital son capaces de realizar multitareas. Si se observan estos graves impactos en las generaciones más jóvenes, cabe imaginar cómo los adultos mayores podrían verse afectados.
Estas son las tres claves que debes tener en cuenta:
La música mejora el rendimiento
Los resultados también concluyen que escuchar música durante el entrenamiento no tiene efectos negativos en la salud. Por el contrario, ayuda a mejorar la concentración, aumenta la intensidad y mantiene estables los niveles de estrés: Ejercitarse y escuchar música podría ser la combinación perfecta.
Eso sí, los especialistas solo recomiendan tener una lista de reproducción programada para evitar el contacto con el dispositivo mientras se entrena. Cualquier elemento que distraiga del ejercicio, ya sea mensajes de texto, cambiar canciones o introducir información en una aplicación, disminuye el rendimiento y podría poner en riesgo al deportista de sufrir lesiones.
El derbi de Champions