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Cara a Cara: ¿Le tiene ganas Messi a Guardiola?

Cara a Cara: ¿Le tiene ganas Messi a Guardiola?
Cara a Cara: ¿Le tiene ganas Messi a Guardiola?larazon

ES HORA DE PONER LAS COSAS EN SU SITIO; Alfredo Duro

Messi no le debe nada a Guardiola. La historia del Barcelona más ganador de siempre corresponde a una generación irrepetible de jugadores, y por encima de cualquier otro, le corresponde a Messi. Y si me apuras, Quim, te diré que nada de lo que posteriormente aprovechó Guardiola hubiera tenido probablemente el mismo sentido sin tipos como Deco, Etoo y, muy especialmente, Ronaldinho. Y me dejo por el camino nombres como los de Mascherano y Henry. Y hasta aquel Belletti providencial para ganar la Copa de Europa de París... con Frank Rijkaard en el banquillo. El fútbol es de los jugadores. Sobre todo cuando consiguen adaptarse a una idea. Esa idea y ese concepto le pertenecen a otros antes que a Guardiola; sus dueños se llaman Michels, Cruyff, Van Gaal y Frank Rijkaard. Guardiola fue el último en llegar y disfrutó de un Messi descomunal.

Pep le puso bajo sospecha

Tampoco fue Pep el descubridor de Messi. Fue contra el Albacete y por decisión de Rijkaard, al que la historia barcelonista no ha querido guardar el tremendo respeto que se ganó. Por aquella época, Ronaldinho y Messi formaban una pareja de hecho dentro y fuera del campo. Guardiola se cargó a Ronaldinho y puso bajo sospecha los hábitos y costumbres naturales de un jovencísimo e inexperto Messi. Aquello generó una más que visible barrera entre jugador y entrenador. Y mientras tanto, el barcelonismo más institucional y dominante, el nacionalista y el independentista, hicieron de Guardiola una bandera, un icono del catalanismo.

La lista negra

Pep hizo una lista negra. Había nombres ilustres en esa lista. Algunos, como Cesc, íntimo amigo de Messi, le habían costado al club un dineral. Ese vestuario tomó nota entonces sabiendo que, un buen día, Guardiola tendría otros jugadores y las cosas serían muy diferentes. Ninguna prueba fue mejor que el fracaso de Guardiola en Europa contra el Real Madrid. Y tiene pinta que Messi y compañía pretenden que no sea el último.

EL CARIÑO ENTRE DOS GENIOS; Quim Doménech

Leo Messi, aunque te pese, guarda un gran recuerdo de Pep Guardiola. La eliminatoria ante el Bayern será especial para ambos, pero en ningún caso en el sentido vengativo que transmites. Messi sabe que sin Pep no hubiera ganado todo lo que ganó y Pep es consciente (y así lo repite hasta la saciedad) que si no fuera por esa generación de futbolistas y en especial por Messi, no hubieran celebrado tantos títulos. Ahora la estrella azulgrana se toma el enfrentamiento ante los alemanes como un gran reto personal: eliminar al equipo más temido de Europa y volver a llegar a una final de la «Champions».

Duelo entre los mejores

Ninguno de los dos quería que ocurriera, pero el destino los ha cruzado en el camino y ahora sólo puede quedar uno. Sin embargo, mientras tú buscas el enfrentamiento personal, yo quiero quedarme con la emoción de asistir a un duelo entre el mejor técnico y el mejor futbolista del planeta. Me interesa saber cómo intentará Guardiola frenar tácticamente al jugador que tanta gloria le dio y cómo tratará Messi, el líder del equipo, de superar a un conjunto dirigido por el entrenador que supo sacar su mejor versión, que le entendió desde el primer día y le enmarcó en un sistema ganador. Porque ellos dos fueron los grandes artífices de la mejor etapa de la historia del Barcelona. Con Pep y Leo se logró el sextete y tantos otros títulos que situaron al Barcelona en primera línea mundial. Ahora el técnico, que fue despedido con pasillo de sus jugadores y una gran ovación del Camp Nou, volverá a casa con sentimientos encontrados.

Se repetirá el abrazo

Recuerdo ese abrazo de Messi con Guardiola en uno de los últimos días del técnico en el banquillo del Barcelona. Hubo un lógico desgaste entre ambos a causa del roce y la exigencia diaria de muchos años al máximo nivel, pero se tienen un sumo respeto mutuo y ese gesto es la mejor muestra del agradecimiento que sienten el uno por el otro. Estoy seguro de que el miércoles se repetirá ese abrazo que representa el cariño que existe entre dos genios del fútbol actual.