¡Amunt Voro!

El valencianismo ha vuelto a unirse más que nunca después de la victoria ante el Espanyol. Tres puntos que le dan mucha vida al conjunto che para poder escapar de la zona peligrosa, de la aterradora posibilidad de un descenso. La llegada de nuevo de Voro, haciendo honor a su nombre (Salvador), es otra vez esperanzadora. Coge al equipo por quinta vez en momentos muy delicados y la afición tiene puesta su fe en el que fuera un gran jugador de la casa y que vive los colores valencianistas con todo el sentimiento que se merece este gran club.

- Otra vez salvador

Mestalla fue una caldera de unión con su nuevo técnico, al que adoran porque siempre ha sido el mejor bombero en los momentos en los que el incendio ya abrasa. En Voro encuentran la serenidad para apagar unas fallas adelantadas. La imagen que dio el equipo permite ser optimista y devolver tranquilidad a una afición que siempre se vuelca con su club cuando más lo necesita, aunque también, inevitablemente, muestre su desencanto cuando las cosas no se hacen bien. Esa magnífica hinchada sabe que con Voro tiene a uno de los suyos en el banquillo. Ahora falta que también los jugadores, el vestuario en pleno, se aplique el dicho de Fuenteovejuna: todos a una a tirar del carro del Valencia. Con su Salvador. ¡Amunt Voro!