Real Madrid

Real Madrid

Isco combina la magia con el trabajo

La Razón
La RazónLa Razón

El madridismo vive días de éxito y gloria que hoy se verán refrendados en la Gala FIFA, donde arrolla la presencia de las estrellas del mejor club del mundo con Cristiano y Zidane al frente. El sábado se logró, además, otra goleada ante el Granada, y se hizo con un fútbol de alta escuela, con el añadido de una presión extraordinaria sin balón. Este equipo tiene talento, pero también hambre. Y una de las claves que acredita todo esto es Isco Alarcón.

Pide balón

El malagueño posee un talento natural para jugar al fútbol. Lo tiene todo para ser un jugador único: regate, con el que desborda con pasmosa facilidad en cualquier zona del campo generando superioridad numérica. También le acompaña una gran visión de juego y sus asistencias y paredes con los delanteros dificultan la labor de las defensas adversarias. Otra de sus virtudes es la movilidad y apoyos en el medio campo. Siempre quiere y pide el balón para desahogar y marcar el ritmo del juego. Y llega muy bien al área contraria.

Se ganó al estadio

La aportación de Isco al colectivo siempre es generosa. Pero es que ya suma también cuatro goles en la Liga y varias asistencias. Por su juventud, su progresión es constante. Y en el Real Madrid y en la Selección va a tener protagonismo los próximos años. Zidane cuida a Alarcón incluso cuando el futbolista ha mostrado algunas dudas por jugar menos de lo que pensaba. Pero lo mima y le da un rol estelar dentro del conjunto. En los momentos delicados en los que no jugaba mucho y no se sentía importante en el grupo, ahí estaba el técnico francés para animar, echarle una mano y demostrarle con hechos que sí es importante en el equipo. El Madrid tiene en Isco un valor seguro, talento, magia y trabajo en el centro del campo. El Bernabéu lo sabe y se rinde al andaluz.